Breaking Bad y Modern Family triunfan en unos Emmys tan repartidos como sorprendentes
Pilar Toro 23 septiembre, 2013 0
Unos esperaban sorpresas y otros no, y al final no se puede decir que la edición número 65 de los Premios Emmy haya decepcionado a nadie. Bueno, tal vez a los que esperaban una gala entretenida. Pero la emoción que ha faltado en la gala presentada por Neil Patrick Harris (Cómo conocí a vuestra madre) la han puesto los resultados, muchos de ellos completamente imprevisibles. Comencemos el repaso.
COMEDIA: Modern Family y Veep se reparten la gloria en el último año de 30 Rock
No ha habido sorpresa en la categoría grande: Modern Family se ha alzado por cuarto año consecutivo con el galardón de Mejor Comedia, entrando en el Olimpo reservado sólo a dos series: Cheers y All in the Family, y se queda a un paso de igualar a la comedia más laureada de todos los tiempos: Frasier, que obtuvo un total de cinco premios Emmy a lo largo de su vida. La serie también ha obtenido el premio a Mejor Dirección de Comedia.
Sin embargo, sí que ha habido lugar a lo inesperado en las categorías actorales, especialmente en las secundarias. Y es que se esperaba que Modern Family volviera a alzarse con los dos galardones, ya que lleva copando estas categorías desde su inicio, y no ha sido así. De hecho, dos actores menos conocidos han sido los que les han “robado” los premios. Tony Hale ha ganado Mejor Actor Secundario de Comedia por su papel en Veep (aunque también habrá influido que los académicos ya le conocieran como Buster Bluth en Arrested Development), y una poco conocida pero muy querida por los seguidores de Nurse Jackie Merritt Wever se ha alzado con el premio a Mejor Actriz Secundaria de Comedia en su segunda nominación por el mismo papel. Recientemente hemos visto también a la actriz en varios capítulos de la comedia New Girl. La actriz estaba tan impactada por su victoria que apenas ha podido pronunciar un “gracias” antes de retirarse del escenario.
En las categorías principales de actuación los resultados no han sido tan sorprendentes, ya que los galardones han recaído en dos actores muy queridos por los Emmy: Julia Louis-Dreyfus (Veep) y Jim Parsons (The Big Bang Theory). Ésta ha sido el cuarto Emmy de la actriz de Seinfeld Julia Louis-Dreyfus, y el segundo consecutivo por su papel de Selina Meyer en la serie de HBO Veep. Hay que destacar que el discurso de la actriz ha sido de los más divertidos gracias a la participación de sus compañeros de reparto, que han intervenido interpretando a sus personajes en la serie. Jim Parsons no se queda atrás, ya que se ha alzado con su tercer Emmy por su ya icónico papel de Sheldon Cooper en la comedia de CBS The Big Bang Theory.
En el año de su despedida, 30 Rock, antaño niña bonita de los Emmys, ha tenido que conformarse con “las sobras”, y Tina Fey sólo ha podido subir al escenario a recoger el premio a Mejor Guión de Comedia (aunque recordemos que la serie se llevó ya un merecidísimo premio a Mejor Reparto la semana pasada en los Emmys técnicos. En cualquier caso, se confirma que los Emmy no son dados a homenajear a series por el hecho de que se despidan, y no han hecho una excepción en este caso.
DRAMA: Breaking Bad, reconocimiento tardío pero merecido
Las categorías de drama se presentaban este año muy abiertas, y así han sido los resultados. Lo primero que hay que destacar es, por supuesto, la victoria (¡por fin!) de Breaking Bad como Mejor Serie de Drama por el primer tramo de su quinta temporada. Durante sus tres primeros años el panorama estaba dominado por Mad Men, y el año pasado fue Homeland quien le quitó el premio de las manos. Pero los Emmy no podían hacer oídos sordos al ruido mediático que está generando la recta final de la serie, y han decidido que ya era hora de reconocerla. También muy merecido es el galardón a Mejor Actriz Secundaria de Drama que ha obtenido Anna Gunn, quien hace unos días se quejó de lo mal considerado que estaba el personaje de Skyler White entre los fans, y ahora ve por fin reconocido su trabajo. Recordemos que Breaking Bad aún tendrá otra oportunidad de revalidar su victoria el año que viene, cuando entrará a competir por la última tanda de capítulos de la serie, actualmente en emisión.
Aunque la victoria rotunda haya sido para Breaking Bad, Homeland, la gran triunfadora el año pasado, tampoco se ha quedado atrás. Claire Danes ha conseguido su segundo Emmy por su interpretación de la agente de la CIA bipolar Carrie Mathison (no ha conseguido al final Kerry Washington dar el campanazo con su Olivia Pope de Scandal) y la serie ha obtenido también el Emmy a Mejor Guión de Drama por su brillante capítulo ‘Q&A’.
También en Drama ha habido lugar para las sorpresas, especialmente en las categorías interpretativas masculinas. Mejor Actor Secundario ha ido a parar a Bobby Cannavale por Boardwalk Empire (visto recientemente también en Nurse Jackie), cuya interpretación había sido alabada por los seguidores de la serie pero parecía un contendiente débil a la hora de luchar por la estatuilla. Y aún más sorprendente parece el reconocimiento a Jeff Daniels como Mejor Actor de Drama por su papel de Will McAvoy en la serie de Aaron Sorkin The Newsroom, que no parecía tener opciones frente a contendientes como el ganador de tres Emmys Bryan Cranston (Breaking Bad), el ganador de dos Oscar Kevin Spacey (House of Cards) o el triunfador del pasado año Damian Lewis (Homeland).
Por último, el Emmy a Mejor Dirección de Drama ha recaído en el reputado director David Fincher (El club de la lucha, La red social) por el episodio piloto de House of Cards. Dramas como Mad Men o Downton Abbey, que triunfaban hace no muchas ediciones, se han ido de vacío este año, al menos en las categorías principales.
MINISERIE: Behind the Candelabra se corona pero deja hueco a sorpresas
En las categorías de Miniserie o TV Movie se han cumplido las previsiones, al menos en las categorías principales. Como ya anunciaban los Emmys técnicos, Behind the Candelabra, la película para televisión de HBO sobre el pianista Liberace, se ha hecho con los tres galardones principales: Mejor Miniserie o TV Movie, Mejor Actor (Michael Douglas, que se ha permitido bromear con Matt Damon durante su discurso sobre la relación entre sus personajes en la película, y le ha asegurado que no podría haber conseguido el premio sin él) y Mejor Dirección (Steven Soderbergh, ganador del Oscar por Traffic). Behind the Candelabra se ha convertido así en lo más premiado este año, con un total de once estatuillas.
El premio a Mejor Actriz Secundaria ha sido para Laura Linney, que logra por fin reconocimiento por su Cathy Jamison de The Big C, por los cuatro últimos capítulos que han compuesto el especial con el que se despedía la serie. James Cromwell ha conseguido el único galardón en categoría principal para American Horror Story: Asylum, ya que sus compañeros de reparto Jessica Lange, Zachary Quinto y Sarah Pauson, también nominados, no han tenido la misma suerte.
Las dos grandes sorpresas en estas categorías las han dado Ellen Burstyn (Réquiem por un sueño), que ha ganado el Emmy a Mejor Actriz Secundaria de Miniserie por Political Animals, de USA Network; y la serie británica The Hour, ya cancelada, que ha obtenido, contra todo pronóstico, el premio a Mejor Guión.
OTRAS CATEGORÍAS
En otras categorías podemos destacar la doble victoria del late show The Colbert Report como Mejor Programa de Variedades y Mejor Guión de Programa de Variedades. El conocido programa The Voice ha ganado Mejor Reality, y Saturday Night Live, Mejor Dirección de un Programa de Variedades.
LA GALA
Como apuntábamos al principio de esta crónica, la gala presentada por Neil Patrick Harris no ha sido precisamente un ejemplo de ritmo y dinamismo. Ha empezado con un vídeo en el que las series y programas nominados “conversaban” entre sí, para después dar paso a una presentación en la que interactuaba con presentadores anteriores de los premios (Jane Lynch, Jimmy Fallon y Conan O’Brien), y que ha finalizado con uno de los mejores momentos de la gala: la intervención de Kevin Spacey hablando a cámara parodiando su personaje en House of Cards. Por supuesto, Tina Fey y Amy Poehler han aprovechado también para poner su punto de humor antes de presentar la primera categoría.
Los números musicales, de los que se esperaban grandes cosas dado que han sido la especialidad del actor que interpreta a Barney en Cómo conocí a vuestra madre cuando ha presentado los premios Tony, no han brillado particularmente. A mitad de gala ha tenido uno con la participación de Sarah Silverman y Nathan Fillion (Castle), su compañero de reparto en Dr. Horrible’s Sing-Along Blog, pero no ha sido tan lucido como el segundo, en el que, a través de coreografías, se hacía un repaso a algunas de las principales series del año, para dar paso a la categoría de Mejor Coreografía. Elton John puso otra nota musical para homenajear al pianista Liberace con la canción ‘Home Again’, pero su número resultó algo contraproducente dentro de una gala ya de por sí demasiado larga, puesto que sólo nos aportó más ganas de irnos a dormir.
En un año tan trágico como éste para el mundo de la televisión, era inevitable que el In Memoriam tuviese más peso que nunca. Y así ha sido, porque, además del tradicional repaso a los nombres de los que nos han dejado en estos últimos doce meses, algunos actores han querido rendir un particular homenaje a algunos fallecidos cercanos. Algunos de los más emotivos han sido el de Jane Lynch al joven Cory Monteith (Glee) o el de Edie Falco a su marido en la ficción, James Gandolfini (Los Soprano).
Por lo tanto, en general ha sido una gala un tanto tediosa (como suelen ser este tipo de galas, por otra parte) pero la emoción ha residido en los premios en sí, lo cual habla bien del año que ha tenido la industria de la televisión que, al menos de momento, parece que sigue teniendo excelencia suficiente como para hacer que los premios estén muy repartidos, y eso siempre se traduce en satisfacción para los espectadores. A ver qué pasa el próximo año. En Frikarte lo estaremos esperando con muchas ganas.
Puedes consultar la lista completa de premiados aquí.
Fuente [imágenes]: IMDB
[pinit]
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