La producción de Meiro Koizumi llega a nuestro país de la mano del Centro de Arte Caja de Burgos en una muestra audiovisual que juega con la condición humana y la rinde ante el imaginario estético del videoartista nipón. Sin alejarse de sus raíces, Koizumi explora las debilidades del ser humano desde una perspectiva interna e individual, teniendo por referencia sus interacciones en el entorno humano, sus costumbres, condiciones y erótica.
Su pericia para generar entornos oscuros y asfixiantes convierte la producción de Koizumi en un dardo audiovisual, en un apasionado discurso –indirecto a través de sus personajes– en el que el poder político y la tradición japonesa cuentan con un rol destacado y la suma de elementos y recursos técnicos deviene una contundente radiografía de la gloria y la miseria de ser humano.