- Dolor y sensibilidad en o alrededor de una articulación. Este es el síntoma más frecuente y evidente de que una persona puede tener bursitis.
- Dificultad para mover la articulación afectada. Esto ocurre porque la bolsa sinovial está inflamada, lo que dificulta el movimiento de la articulación.
- Enrojecimiento de la piel. La bolsa sinovial inflamada puede provocar un cambio de color en la piel que hay alrededor de la articulación.
- Quemazón. La irritación de la bolsa sinovial puede provocar ardor en la piel circundante y hacer que esté más caliente que de costumbre.
Revista Salud y Bienestar
Una bursa es una bolsa de color nacarado que protege y amortigua las articulaciones. Bursitis significa la inflamación de una de esas bursas. La bursitis puede ocurrir en los hombros, los codos, las caderas, las rodillas, los talones y el dedo gordo del pie. Las lesiones, el exceso de uso y el estrés repetitivo son causas comunes de bursitis. Algunas enfermedades, tales como la artritis y gota también pueden causarla. A veces ocurre con la tendonitis. La bursitis puede provocar diversos síntomas: