Buscar empleo en Comunicación

El mundo de la comunicación, en los tiempos que corren, está atravesando un momento delicado, sobre todo en lo que a materia de empleo se refiere. Los medios que no tratan de superar la crisis de números, tratan de adaptarse a los nuevos tiempos y a los cambios tecnológicos, hacen ajustes reduciendo sus inversiones y todo con los menores costes posibles. Por eso, si has estudiado periodismo o comunicación (o similar) y estás a la caza y captura de un puesto de trabajo, no desesperes. Nadie ha dicho que sea imposible, pero sí que puede que un poco difícil.

Sin embargo y a pesar del panorama, siempre se puede llevar con el mejor humor posible, así que atent@ a estos consejos que, por experiencia (la baja de maternidad que cubro se me acaba el mes que viene), he tenido que seguir yo:

• Actualiza tu currículum: y haz que sea original, visual y dinámico. Que no ocupe más de una página y que tenga todos tus datos bien especificados. Si no tienes mucha experiencia laboral, también puedes destacar otros aspectos como los conocimientos que has adquirido por tu cuenta y tus aptitudes. ¡Remarca aquello que se te da bien! ¡Véndete mucho!
• Crea un blog: las empresas, cada vez más, se están metiendo en el mundillo digital. Si eres periodista, o un publicista aspirante a copy, un blog puede ayudarte a redactar, a estar al tanto de la actualidad y a hacer contactos. Crea contenidos de calidad, habla de cosas que te apasionen e intenta demostrar lo que vales con un sitio que invite a quedarse.
• No te limites a las ofertas: es cierto que todos los días salen ofertas de trabajo, sobre todo en páginas de Internet, pero limitarse a registrarse en todas esas páginas y luego simplemente “aplicar esta oferta” o “apuntarte”, no es buena idea. Entérate de la empresa que convoca esa vacante, métete en su página y consigue un e-mail de contacto para enviar, personalmente, tu currículum y una breve (¡¡¡BREVE!!! NADA DE ENROLLARTE COMO LAS PERSIANAS, A NADIE LE GUSTAN LOS TOCHOS) carta de presentación. Así, tu correo no llegará en el formato estándar de la página de turno (“Fulanito está interesado en esta oferta de su empresa”) y se destacará del resto. Dedica gran parte del día a este proceso, aunque te lleve horas mandar todos los e-mails personalizados para cada empresa. Y mándalos a empresas que no tengan procesos de selección abiertos, porque a lo mejor se guardan tu currículum para cuando los tengan.
• Escribe a los jefes: ellos también se aburren de vez en cuando en la oficina y, por supuesto, revisan su correo. Aprovecha para mandarles un mail contándoles por qué te gustaría trabajar con ellos.
• Haz contactos: aprende de todo aquel que se acerque, no dejes de buscar nuevas empresas que puedan ser interesantes para ti en el futuro (aunque estés trabajando) y conoce a gente en conferencias, eventos, etc.
• Asume que te llegarán ofertas de becario: lamentablemente, ser becario es el pan nuestro de cada día. Las empresas no van a ofrecerte un contrato estupendo a la primera de cambio sin probar cómo trabajas. Ármate de paciencia y valor, lee las entradas de mundo becario de este blog, y ¡adelante! Quizá en unos meses, demostrando todo lo que vales, puedas prosperar y conseguir un puesto mejor.

Y lo más importante: nada de quedarse parado. Con una conexión a Internet y un poco de imaginación, pueden salir oportunidades de donde menos las esperes. La cosa es estar en el momento apropiado, en el sitio adecuado. ¡Mucho ánimo!