El anterior post nos servía de introducción hacia la cirugía bariátrica. Este tipo de cirugía hace cambios en tu sistema digestivo para al limitar la cantidad de alimentos que puedes ingerir, para reducir la absorción de nutrientes o para ambas, con el fin de que pierdas peso. Estos tipos de cirugía se hacen cuando la dieta y el ejercicio físico no han funcionado o cuando se sufren graves problemas de salud por culpa del sobrepeso.
El bypass gástrico, así como otros tipos de cirugía de pérdida de peso, se hacen en un hospital y se suele usar anestesia general, lo que significa que estarás inconsciente durante el procedimiento. Los detalles de la cirugía depende de tu situación personal, del tipo de cirugía escogido para tu caso y de las prácticas del hospital o del médico.
Hoy en día, la mayoría de los tipos de cirugía bariátrica se realiza por vía laparoscópica. Un laparoscopio es un instrumento pequeño y tubular con una cámara en la punta. El laparoscopio se inserta a través de pequeñas incisiones en el abdomen y la cámara del mismo es la que permite al cirujano ver y operar sin necesidad de hacer grandes incisiones. La cirugía laparoscópica puede hacer que tu recuperación sea más rápida y corta, aunque no es adecuada para todos los casos. La cirugía generalmente dura varias horas. Después de la cirugía te despertarás en una sala de recuperación, donde el personal médico te vigila por si hubiera alguna complicación.
Tu médico es el que mejor te puede informar sobre los pros y contras, así como del tipo de cirugía que encaja más con tu perfil. A continuación comentamos los tipos de bypass:
Roux-en-Y (roo-en-y). Es el método más común de bypass gástrico. Esta cirugía no suele ser reversible y su objetivo consiste en disminuir la cantidad de alimentos que puedes comer en una sola sesión y en reducir la absorción de nutrientes. Este procedimiento consiste en crear pequeño estómago, del tamaño de una nuez aproximadamente, a partir de la curvatura menor del estómago original, más una desviación a la parte intermedia del intestino delgado.
Derivación biliopancreática con cruce duodenal. Este es un procedimiento más complejo que consta de varias partes donde se elimina aproximadamente el 80% del estómago. Si bien es muy eficaz, tiene más riesgos, incluyendo la desnutrición y ciertas deficiencias vitamínicas. Se utiliza generalmente para las personas que tienen un índice de masa corporal superior a 50. En este procedimiento se conserva aproximadamente el 20% del estómago con su válvula pilórica, válvula que libera los alimentos al intestino delgado. El duodeno, parte del intestino delgado que conecta con el estómago, más una parte de intestino delgado (unos 250 cm) se conectan al intestino grueso. El resto del duodeno/intestino delgado que sigue conectado al páncreas y a la vesícula biliar se une a la parte final de esos 250 cm de intestino delgado acortado. El denominado “canal común”, donde confluyen ambas secciones de intestino delgado, desemboca en el intestino grueso.
En siguiente post veremos otros tipos de cirugías para adelgazar diferentes a los bypass, como la Banda gástrica ajustable laparoscópica (BGAL), la Gastroplastia vertical en banda (grapado de estómago) y la Gastrectomía en manga o vertical.
Relacionado con: Diabetes, Obesidad