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Cabeceras míticas de las series de televisión – Primera Parte

Publicado el 08 agosto 2013 por Cinefagos

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Recuerdo que en ‘Demolition Man’, en el futuro las únicas canciones que sobrevivían eran sintonías de los anuncios de televisión del siglo XX. Y es que la televisión, el objeto por excelencia del siglo pasado y al que ya le he dedicado parte de la atención que se merece, tuvo un gran éxito ya que se colaba directamente en las casas de la gente día tras día, convirtiendo en familiares rostros, historias y por supuesto, sintonías y canciones. Las series de televisión contaban con inicios que se han hecho famosos gracias a la repetición, y aquí van algunas de las más famosas cabeceras de todos los tiempos y en las que veremos una clara evolución con el paso de los años.

Twin Peaks

La serie creada por David “Pelazo” Lynch fue de las primeras en desatar el boom de las series. Si bien no todos sabemos quién mató a Laura Palmer o qué demonios pasaba en la mayoría de los capítulos (Tengo pendiente un post sobre ella), todos recordamos la calmada sintonía de su cabecera, con esos escenarios boscosos de los que se apropiaría más tarde la grandísima Expediente X.

El Equipo A

En 1972, un comando compueso por cuatro de los mejores hombres del ejército americano, fueron encarcelados por un delito que no habían cometido. No tardaron en fugarse de la prisión en la que se encontraban recluidos. Hoy, buscados todavía por el gobiernos sobreviven como soldados de fortuna. Si tiene usted algún problema y se los encuentra quizá pueda contratarlos.

Esta serie es un tópico de la televisión española, repetida hasta la saciedad. A estas alturas, a todos nos parece absurdo que siempre los encerrasen en una ferretería en la que podían construir un vehículo que les permitía escapar de los malvados que extorsionaban a los rancheros, a la vez que los vehículos del ejército siempre volcaban tras pasar por un arbusto. La película que hicieron me pareció bastante mala,  y es que quizá el encanto de la serie consistía en eso, en que era un entretenimiento ligero durante la hora de la sobremesa.

V – Los visitantes

Los lagartos comandados por la mítica Diana son más complejos de ver de lo que parece. Al principio fueron una miniserie, luego otra conocida como The Final Battle y más tarde una serie regular finalmente cancelada que fue cuando la cosa se desbordó. A nadie le pasan desapercibidos los guiños al nazismo, que se perderían más tarde. Si bien hay dos cabeceras, mi favorita es la que os pongo en segundo lugar, mucho más austera pero impresionante, con una música perfecta e inolvidable.

Cosas de Casa

Repulsiva, histriónica y ñoña a partes iguales, esta serie es más de lo que los estómagos de muchos pueden aguantar. Esta sitcom familiar iba a contar sólo en su episodio piloto con la presencia de Steve Urkel, pero los productores viendo oro en aquel muchacho de aspecto abofeteable y lo contrataron como el auténtico protagonista de la serie. A día de hoy, Jaleel White ha aparecido en algún capítulo de House y en películas tan interesantes como Megashark vs Crocosaurus.

El príncipe de Bel- Air

Mucho antes de que fuese padre de dos critters aborrecibles, Will Smith saltó a la fama en el campo de la música y protagonizando esta mítica serie, consiguiendo una popularidad que jamás le ha abandonado. A día de hoy puede seguir viéndose y no ha perdido casi nada de frescura, si bien vemos la excesiva moralina de algunas partes y un poco de racismo que enlaza con la glorificación del “Black Powah” de entonces.

Los vigilantes de la Playa

Pamela Anderson y David Hasseholff merodeaban por la playa con más índice de ahogamientos del planeta, alternando vergonzosas escenas donde lucían cuerpo con tramas que acabaron bordeando el asesinato y la mafia. Tuvo una secuela llamada Los Vigilantes de la Noche, en la que los mismos personajes alternaban su puesto junto a los salvavidas con su profesión de detectives privados en Los Ángeles. Si os digo que tiene un 2.1 de nota en Filmaffinity, os haréis a la idea de cómo es.

Expediente X

Como fan, podría decir que Expediente X es una de las mejores series de la historia. Y desde un punto de vista objetivo, pues también. A Mulder y Scully les he dedicado un larguísimo especial que podéis leer aquí, así que sólo diré que esa cabecera era capaz de poner los pelos de punta a cualquiera. Una canción imposible de tararear llena de imágenes espeluznantes.

Calor Tropical

Esta cabecera es una auténtica horterada, tan larga que se llega a hacer desesperante y que sólo se comprende por la época a la que pertenece. Esa coleta y ese montaje nos llevan a un tiempo donde la vida era más sencilla y donde casi nos parece ver una secuela no oficial de Las Aventuras de Ford Farlaine.

Los Simpsons

Sé que nadie va a ver el vídeo que hay sobre estas líneas, y es porque el repaso a la ciudad de Springfield es tan famoso que podemos hacérnoslo con los ojos cerrados. Veinte años lleva en antena, y hace demasiado que dejó de hacer gracia, pero lo cierto es que en su momento cada capítulo era una genialidad. Por cierto, he descubierto que hay una cabecera nueva en la que aparecen más personajes.

Friends

Nunca me gustó Friends. De hecho, me sus protagonistas me caen mal, pero no se puede negar que con diez temporadas se trata de una de las producciones más famosas de la televisión. Al final se acabó convirtiendo en un escaparate para famosos que hacían cameos, y dio origen a la sobreexplotada Cómo conocí a Vuestra Madre

Dinosaurios

Lo más triste de esta serie es saber que ya no se hacen cosas así, aparte de su final, en el que presenciábamos la extinción de los Dinosaurios. Ideada por el hijo de Jim Henson, creador de los Teleñecos, es bastante famosa y todos siguen recordándola.

Aquellos Maravillosos años

Por desgracia, no tengo muchos recuerdos de esta serie, y creo que debería verla de nuevo. No sólo porque la vi hace muchos años, sino porque ahora como adulto podría entender en qué consistía, en recordar una época de cambio y profunda transición en un mundo que parecía demasiado grande y extraño. Escuchar esa canción siempre trae recuerdos de nostalgia, que era la esencia del programa, a la vez que nos vienen a la cabeza imágenes de Hippies, amor libre, y la guerra de Vietnam. No, el amigo no es Marilyn Manson de joven, eso ya quedó claro hace mucho tiempo.

Matrimonio con Hijos

La vida de una familia tan infeliz como otra cualquiera gozó de gran éxito, a pesar de su humor simple, llano y consistente en ir soltando chistes frase tras frase que… ¡Coño, Christina Applegate! Pues eso, que gustó mucho gracias a que rompía un poco con la imagen de las típicas familias modelo de las otras sitcoms. Ed Neill se convirtió en un “hombre de culto” por los miembros de la clase media estadounidense, y a día de hoy sigue trabajando.

Cabeceras míticas de las series de televisión – Primera Parte
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