Si ya asociamos en otras entradas los elevados precios de Starbucks al valor añadido que aportan: sofás, ambiente, conexión a Internet gratuita, enchufes... Ahora amplían la calidad de este valor añadiéndole música y lo hacen nada más y nada menos que de la mano de Spotify.
El acuerdo consiste en ofrecer una subscripción a la plataforma musical para unos 7.000 locales, lo que permitirá fomentar el ambiente musical en estos espacios. Además, los consumidores de Starbucks que estén en estos locales podrán, ya sea a través de la web de Starbucks como de Spotify votar la música o canciones que quieren escuchar.Los usuarios de Spotify que además realicen estas acciones e interactúen con la plataforma de música, serán premiados con puntos que a su vez podrán ser intercambiados por bebidas o comidas en Starbucks.
Sin duda alguna, será una unión muy fuerte para un tipo de audiencia que se adapta muy bien.