La nuez es la semilla del árbol del nogal. Un fruto seco rico en grasas insaturadas y omega 3 que en el hemisferio norte suele recogerse a principios del otoño y hasta mediados del invierno, pero que en el hemisferio sur está justo en plena temporada.
Es por eso que cuando Pilar Monge de Postres Originales nos propuso este fruto entre los ingredientes para el reto #ColorYSabor de Temporada, me decidí a escogerlo, ya que tenemos aún nueces de las que nos da el nogal del invierno pasado.
Un nogal en el huerto
La cremosidad de la salsa de queso con la contundencia de la nuez y la suavidad del calabacín hacen de esta receta una elección vegetariana deliciosa. Además, las nueces aportan un alto contenido en proteínas vegetales, convirtiendo la receta en un plato muy completo.
Los pimientos añaden un toque fuerte a la combinación de sabores, pero si no os gustan podemos suprimirlos, o cambiarlos por rodajas de aceitunas negras, por ejemplo.
Es una receta perfecta tanto para una cena, como para un almuerzo acompañados por ejemplo, de una ensalada.
Ingredientes: (2 personas)
- 6 o 7 nueces
- 2 calabacines
- 1 cebolla pequeña
- 1 pimiento del piquillo
- 5 cucharadas de queso rallado emmental
- 1 taza de harina
- 1 bola de mozarella de búfala
- leche
- pimienta
- nuez moscada
- aceite de oliva
- sal
Elaboración:
En primer lugar sacamos todas las nueces de sus cáscaras y las troceamos un poco. Si las compráis ya preparadas, pues os ahorráis este paso, aunque salen algo más caras.
Cortamos la cebolla en dados, y con la ayuda de una cucharilla, ahuecamos el interior de los calabacines y troceamos también la carne del calabacín que sacamos.
Salamos ligeramente el interior de los calabacines y regamos con un chorreoncito de aceite de oliva. Los introducimos en el horno, mientras este se precalienta a 190ºC y los dejamos mientras que seguimos preparando la receta y el horno se calienta.
Mientras tanto, en una sartén, ponemos unas cucharadas de aceite de oliva y doramos la cebolla, y también el calabacín hasta que este esté tierno. Cuando las verduras estén cocinadas añadimos la harina sin parar de remover hasta que esta se tueste un poco.
Añadimos ahora la leche poco a poco, removiendo sin parar, según nos vaya pidiendo la mezcla, hasta que obtengamos una bechamel cremosa.
Cuando la bechamel tenga la textura deseada incorporamos también las nueces, la pimienta y la nuez moscada rallada. Removemos y mezclamos bien.
Es el momento de añadir el queso emmental rallado, que integraremos bien con la salsa removiendo durante 2 minutos.
Cuando tengamos una crema homogénea, es el momento de sacar los calabacines del horno y rellenarlos con la mezcla.
Encima ponemos la mozarella de búfala cortada en tiras, y tres tiras de pimiento del piquillo en cada calabacín.
Introducimos de nuevo en el horno, y cocinamos durante 15 minutos.
¡Y ya tenemos listos nuestros calabacines con salsa de nueces y queso! Además es una receta que nos la podemos llevar hasta en el tupper, pues aunque no lo parezca, ¡está buenísima también fría!
¡Que aproveche, Calderer@s!