¡Alohaaa! ¿Qué tal? Vengo con un recetón que improvisé el otro día, se trata de unos calabacines luna, totalmente veganos y llenos de sabor. Además es una receta libre de lactosa y de gluten.
Precisamente me esforcé en diseñar un plato especial para una comida con una amiga que le han detectado celiaquía hace poco y quería mostrarle como se puede comer de lujo sin gluten y así que fue, le encantó el menú y fue todo un éxito la receta.
Así que la comparto con todos para que os animéis y si no la hacéis ‘a pies juntillas’ pues por lo menos que os sirve de inspiración para hacerla a vuestra manera.
La bechamel vegana está hecha a partir de leche de coco pero también podéis usar leche vegetal dejándola reducir o utilizando natas vegetales: almendra, soja, etc.
Para acompañar y aprovechar el horno puse unos tomatitos cherrys de colores que le dieron una guarnición colorida y divertida a los calabacines, pero podéis añadir otras verduras como champiñones, setas, ramitas de brócoli, coliflor…
Así, que sin más, vamos al lío con este recetón:
- INGREDIENTES (para 3 raciones)
-3 calabacines luna
-1 lata de leche de coco
-1 trozo de hinojo fresco (también podemos usar puerro o cebolla)
-1 zanahoria
-1 puñado de arroz negro (salvaje u otro tipo: basmati…)
-1/2 cucharadita de nuez moscada
-1/2 cucharadita de pimienta negra molida
-un chorrito de Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE)
-tomates cherrys de colores
-unas ramitas de romero fresco o tomillo
-sal al gusto
- ELABORACIÓN
- Lavamos bien los calabacines. Le quitamos la parte de arriba con cuidado de no romperla, ya que más adelante nos servirá de tapa. Y con un sacabolas vaciamos los calabacines dejando una capita no muy gruesa pero sin llegar a la piel. Reservamos el interior para la bechamel. Reservamos los calabacines.
- En una sartén ponemos un poco de AOVE a calentar y rehogamos nuestras verduras troceadas: zanahoria, hinojo, puerro, etc. Mientras tanto podemos cocer el arroz en un cazo pequeño (yo siempre añado una hojita de laurel y un ajo sin pelar para aromatizarlo). Añadimos la leche de coco y el arroz cuando esté cocido.
- Añadimos las especias y rectificamos de sal. Deberá quedar una salsa espesa, a modo de bechamel. Cuando esté todo integrado reservamos.
- Pintamos con aceite neutro (girasol, por ejemplo) o margarina una bandeja para horno y colocamos nuestros calabacines. Rellenamos con la bechamel y colocamos los tomates cherrys en los huecos libres previamente pintados con AOVE. Añadimos unas ramitas de hierbas frescas y metemos al horno unos 20-30 minutos a 200ºC. Cuando veamos que al introducir un cuchillo en el calabacín está tierno, ya tendremos listo nuestro plato. Servir inmediatamente.
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