— Tú ganas, dos minutos, Martita, soy un hombre ocupado.— Tanto mejor, sois el tipo de personas que termináis por agradecer más un poco de… aventura.— Ah, ¡es una agencia de viajes!, ¡touché, qué original! Compro, Martita, si el viaje es contigo…— Eres un chico malo, Julito… Ojalá. Aunque viajar viajaremos, mmmm… Tan lejos como tú quieras.— Dispara.— Está bien. Ahora que he captado tu atención te lo diré. Soy estudiante de ingeniería, Julio, o como te llames. La cosa está jodida, eso lo debes saber tanto como yo y si no casi mejor, te felicito. No te asustes. Me metí a trabajar en esto… en una linea erótica, ya lo he dicho, para ayudarme con los estudios, lo de siempre. Pero hasta aquí llega la crisis, maldita sea. El otro día cerraron la empresa, sabes. Dándole vueltas a la cosa… ¿sigues ahí?…—… (asiente con un ruido)— Dándole vueltas pensé en crear una línea de… de cobro revertido. ¿Has visto como suena?, como un síndrome, jajaja…, mi síndrome.— Te sigo… Martita…— Mira. ¿Quién llama a las lineas eróticas? Nosotras, bueno, nosotros por hablar en general, hacemos un servicio, ayudamos a la gente; personas que se sienten solas, necesitadas de alguien que les escuche, que les de cariño, que alimente sus fantasías. Bueno también hay mucho guarro, mucho salido asqueroso, para que lo voy a negar…— (Carraspea levemente)— De esta otra manera, Julio. (Exaltadamente) Llegaremos a esos otros que sin saberlo o sin atreverse a reconocerlo también necesitan escapar, volar con la imaginación, soñar… excitarse. ¿Estás excitado…, Julio?— … Atónito es lo que estoy, Marta. Tienes una voz estupenda, resultas muy…, cómo lo diría, muy sexy. Qué te hace pensar que no vuele yo lo bastante, cómo diríamos…, con mis propias alas.— Nadie ha dicho lo contrario, cariño. Pero yo también me valoro, sabes. Creo que si me conocieras también querrías volar conmigo. Después de todo es tan amplio el cielo…— Es lo más divertido que me ha ocurrido esta semana, lo confieso.— De eso se trata, amigo.— Pero cómo funciona. Imagínate que me hubieses convencido, no digo que sea el caso, pero imagínatelo. ¿Cual es el paso siguiente?…… ¿Marta, Marta estás ahí…?…
