Revista Remedios
Se calcula que una de cada quince personas convive con el dolor de cervicales. La tensión emocional, las hernias diacales y las sobrecargas musculares provocadas por posturas incorrectas o por un mal gesto son algunas de las causas que lo provocan. No te resignes y planta cara al dolor con estos recursos naturales.
Aleja la tensión con este improvisado "cojín" de ARROZ
Las personas que tienen una contractura muscular (una torticolis) o que, en períodos de mucho trabajo, se quejan de dolor en el cuello y hombros encuentran alivio aplicando calor de forma local. Si no se tiene a mano una esterilla eléctrica un cojín cervical a base de semillas, huesos de cereza, etc, podemos improvisar uno igual de eficaz echando cuatro puñados de arroz crudo en una bolsa de plástico. Caliéntala en el micro unos pocos minutos y colócala sobre la zona adolorida hasta que se entibie. Repite esta misma operación tantas veces como creas necesario.
HARPAFOGITO, solución natural al dolor
Esta planta, analgésica y antiinflamatoria a partes iguales, ayuda a paliar el dolor de las cervicales al tiempo que combate la rigidez del cuello, mejorando su movilidad. Resulta muy útil en caso de artrosis cervical, así como en el tratamiento de lesiones o traumatismos de evolución lenta. Se recomienda tomar en dosis de 480 mg. dos veces al día.
Friegas de ROMERO, alivio instantáneo
Cuando te notes los músculos de la base del cuello agarrotados, prepara un aceite de masaje que actúa como una excelente relajante muscular. Para ello, añade tres gotas de aceite esencial de romero, de tomillo y de salvia a dos cucharadas de aceite de oliva o, mejor aún, de hipérico (en herbolarios). Remueve y realiza unsuave masaje con el líquido obtenido.
Si el problema es crónico, añade PIÑA a la ensalada
La bromelina, uno de los componentes de mayor utilidad terapeútica de la piña fresca, ejerce un importante efecto antiinflamatorio, mitiga el dolor crónico y favorece a la curación de las lesiones que se producen por desgaste, como la artrosis. Para beneficiarte de estas virtudes, intenta comer piña a diario, troceada en la ensalada, mezclada con guarniciones de arroz blanco o de postre. Otra opción a tu alcance es tomar la bromelina en cápsulas.