Seguramente ya habréis oído algo acerca de las cámaras hiperbáricas en el gimnasio, a un amigo o en la televisión; pero ¿sabemos realmente todas sus aplicaciones y los beneficios y riesgos que comportan?
En esta entrada os mostramos las características de este avance tecnológico para despejar vuestras dudas y tengáis los conocimientos necesarios a la hora de apuntaros a una sesión en una de estas cámaras.
En una visión general las aplicaciones de estas cámaras son numerosas, tanto en el ámbito de la medicina y la salud como en la estética y el bienestar de uno mismo, pues se han probado con buenos resultados en multitud de enfermedades diversas, como la descompresión habitual en los que practican submarinismo o incluso en el tratamiento de la gangrena. En el campo de la estética sus utilidades van desde la mejora de los tejidos cutáneos hasta la ayuda para perder peso.
¿Cómo es posible todo esto?
Las cámaras hiperbáricas son habítaculos adaptados para soportar elevadas presiones de hasta incluso 6 veces la atmosférica y estas pueden ser monoplazas o multiplazas, dependiendo de la capacidad de su interior.
Dentro de estas cámaras se respira oxígeno puro a presiones por encima de lo normal. Cuanto mayor es la presión a la que se somete el cuerpo más aumenta la cantidad de oxígeno disuelto en la sangre. Para que nos hagamos una idea con números, la Presión Parcial de Oxigeno (PpO2) por debajo de 1.4 ATA (Atmósferas absolutas) que sería un nivel normal está en 90mm pudiendo llegar hasta los 2.000-2.400 mm a 3 ATA, lo que supone unas 23 veces más de oxígeno circulando por nuestro organismo.
Un tratamiento normal en una cámara hiperbárica puede rondar las 2 o 3 ATA, aunque en algún tratamiento excepcional para tratar la enfermedad descompresiva se puede llegar hasta 6.
La importancia del Oxígeno para nuestro cuerpo
Además de lo fundamental que es para la vida, pues es el aire que respiramos, es importante conocer como utiliza el oxígeno nuestro metabolismo en los diferentes procesos como la recuperación muscular, la cicatrización o el tratamiento de lesiones.
La Oxigenoterapia es muy utilizada por numerosos deportistas, especialmente aquellos de élite que por su entorno requieren de un estado óptimo físico y de salud, tanto para la recuperación después de grandes sesiones de ejercicio como para curar las lesiones ocurridas durante éstas.
El Oxígeno en el tratamiento de lesiones deportivas
ejemplo de cámara hiperbárica
Las lesiones traumáticas ocasionan daños en los tejidos produciendo hinchazón que impide un flujo normal de oxígeno a la zona afectada. A su vez, las áreas hinchadas demandan mayores cantidades de oxígeno debido a las células que se generan por la hinchazón, justo en el momento menos indicado.
Gracias al aumento de la PpO2 logramos que estas zonas con hipoxia (carencia de O2) puedan recuperarse mucho antes debido a la reactivación del flujo de oxígeno. Además, el aumento de oxígeno en el plasma reduce la cantidad de líquidos que circulan en el mismo evitando así su acumulación en las zonas dañadas.
La oxigenación hiperbárica para acelerar la recuperación post-entrenamiento
Mediante la oxigenación tras los esfuerzos físicos llevados a cabo durante el entrenamiento logramos reactivar aquellos procesos metabólicos deficitarios que se ralentizan debido al desgaste. Ayuda a la recuperación del sistema cardiovascular incrementando el potencial físico y la capacidad de ejercicio.
El aumento de O2 fortalece nuestro sistema inmunológico elevando el nivel de glóbulos en sangre, de modo que no sería necesario tampoco realizar entrenamientos en grandes alturas, aumentando significativamente nuestra condición física. Con ello conseguimos también reducir la fatiga y el cansancio, siendo indicado como tratamiento en pacientes con fatiga crónica, insuficiencia arterial y anemia.
Además de todo esto logramos que nuestro cerebro se oxigene, ayudándonos a la concentración, reduciendo el estrés e incluso mejorando nuestro estado de ánimo, lo que nos ayudará a ver los entrenamientos con una perspectiva más optimista que nos motivará para continuar nuestro camino.
Otras utilidades y curiosidades de la medicina hiperbárica
En el territorio de la medicina como ya hemos visto, sus aplicaciones son numerosas. Tanto es así que desde 1988 existe en España un Comité Coordinador de Centros de Medicina Hiperbárica (CCCMH) que a su vez representa al European Committee for Hyperbaric Medicine (ECHM). La Seguridad Social dispone en algunas Comunidades Autónomas de estos servicios en hospitales propios y concertados.
En Estados Unidos este tratamiento está reconocido por los seguros médicos Medicare como un tratamiento reembolsable para ciertas “condiciones aprobadas”, pudiendo ser prescrita por los médicos para otras indicaciones como la migraña. En el caso del Reino Unido, algunas de estas cámaras son financiadas por el National Health Service, con lo que nos podemos hacer una idea del alcance de este tratamiento.
Entre otras prescripciones, estas son algunas dolencias para las que se recomienda el tratamiento con Oxigenación Hiperbárica (OHB):
- Pie diabético, retinopatía diabética y nefropatía diabética
- Sordera espontánea y pérdida de audición
- Intoxicación con monóxida de carbono (CO2)
- Infecciones necrotizantes y gangrena
- Anemia
- Quemadura térmica
- Auxiliar en el control de la hipertensión
- Revitaliza el apetito sexual y el reloj biológico
- Reducción del estrés y el insomnio
- Agudiza la vista y la memoria
- Ayuda en procesos de pérdida de peso y estabiliza el metabolismo
- Tonifica la piel, disminuyendo la flacidez y arrugas.
- Combate la celulitis.
- Revitaliza y favorece el crecimiento de uñas y cabello, también del color de éste.
- Funciona como reductor de peso y regula os sistemas de envejecimiento
- Riesgos asociados a la Oxigenación Hiperbárica
Sí que existen efectos secundarios leves como dolor de oídos y de los senos nasales debido a la presión, ansiedad debido al espacio reducido de las cámaras monoplaza y un tenue descenso de azúcar en sangre y miopía transitoria que se puede prolongar durante algunos días.
Como todo tratamiento médico existen grupos de alto riesgo a los que no se recomienda su uso como mujeres embarazadas, pacientes con asma o un pulmón colapsado o con cáncer activo y quienes reciben quimioterapia con cisplatino o adriamicina.
Recomendación
La OHB es una ciencia joven y en desarrollo. Podemos encontrarnos que en muchos centros nos lo ofrezcan como solución a multitud de problemas y enfermedades; pero no debemos fiarnos pues muchos lo único que buscan es el beneficio económico en detrimento de los riesgos para la salud de sus pacientes.
No seas ingenuo y si tienes alguna duda, antes de someterte a un tratamiento en una cámara hiperbárica consulta con tu médico las posibles contraindicaciones que pueda suponer, pues cada persona es un mundo.