Un delicioso tratamiento de queratina express y un corte de pelo impecable
Desde hace algún tiempo mi melena estaba pidiendo a gritos
un corte de pelo y un tratamiento adecuado para sanear las puntas y mejorar la
calidad de mis cabellos, así que hace unas semanas me puse en manos de buenos
profesionales. Me dejé caer por un centro de FRANK PROVOST y me atendió Juan
Domínguez Serrano, un tipo encantador y un gran profesional. Fue él quien me recomendó realizarme un
Tratamiento de Queratina Express antes de cortarme el pelo. Seguro que muchas
estáis pensando que este procedimiento está indicado para alisar el cabello, pero no... Se trata de un
protocolo tratante, para devolver a la melena el brillo y la hidratación.
La experiencia fue súper agradable y, lo más importante, me
dejó fantástico el pelo.
La verdad es que la atención de los profesionales del Frank Provost de Claudio Coello
es, como en el resto de los centros, impecable.
Os cuento un poco como transcurrió mi cita con la
belleza capilar:
1-Limpieza: Para empezar me lavó el pelo con un champú neutro
purificante. Se trataba de arrastrar toda la suciedad dejando el cabello suelto
y sedoso. Adoro que me laven la cabeza; es uno de los mejores momentos de la
peluquería… Además, este champú olía a piña colada, por lo que me transportó al
mismísimo Caribe.
2-Sellado de cutícula: Una vez que el cabello estaba limpio, procedieron a
aplicarme un sellador de cutícula. Este producto evita el encrespamiento. Por
cierto, estos profesionales me advirtieron de la importancia de trabajar el
cabello en el sentido de la cutícula para sellarla adecuadamente.
3-Reconstrucción: El tercer paso del protocolo es reconstituyente. Este
proceso de reconstrucción consiste en aplicar un producto y dejarlo actuar de 7
a 10 minutos para reparar la fibra dañada, rellenar los cabellos afinados… en
definitiva, reparar el cuero cabelludo.
4-Hidratación: Por último llegó el momento de la hidratación. Una mascarilla
penetró en mi cabello para devolverle la salud que necesitaba.
El tratamiento dura aproximadamente20 minutos, cinco minutos
aproximadamente por cada paso, y es muy agradable y relajante, lo que se agradece
teniendo en cuenta el ajetreado ritmo de vida que llevamos en la actualidad.
Según me contó Juan, es recomendable repetir este protocolo
para una vez al mes o cada dos meses para mantener la cutícula sellada y el
cabello brillante y bonito.
PVP del tratamiento:
30 €
Mi veredicto:
Tal y como he comentado anteriormente, además de reparar mi cabello, este
tratamiento consiguió hacerme desconectar durante cerca de media hora. Esto no
tiene precio teniendo en cuenta que siempre tengo mil cosas en la cabeza y no
consigo relajarme ni un minuto al día.
Un corte con estilo
Tras disfrutar de 20 minutos de auténtico placer y relax,
pasé al tocador y Juan me cortó el pelo para darle forma y más movimiento. Y,
para terminar, me peinó con una onda abierta muy natural. Tengo que reconocer
que normalmente suelo verme demasiado peinada y artificial cuando voy a la
pelu, pero la verdad es que me encantó el estilo que me dejó. No sé qué
opinaréis vosotr@s pero yo me encontré
bastante favorecida.
Sin duda, repetiré en cuanto mi melena me lo pida.
No sé qué opinaréis vosotr@s, pero yo salí muy contenta con el cambio.
Juan Domínguez Serrano, de Frank Provost, fue el artífice de este cambio.
Desde aquí aprovecho para darle las gracias.
FRANK PROVOST
C/ Claudio Coello, 33.
Madrid
Tel. +34 91 435 01 73