Todas las edades del proceso de crecimiento y desarrollo de un pequeño, están en mayor o menor medida determinadas por cuestiones comunes que tienen que ver con éste mismo criterio, algunas características son más o menos positívas, pero en la mayoría de los casos son naturales, lo que deben hacer los padres es interpretarlas y aprender a manejar las diferentes conductas de sus niños.
Algo muy común por ejemplo son los cambios de humor a los 3 años, los niños pueden volverse sumamente inconstantes a esa edad, cualquier situación mínima es motivo mas que suficiente para romper en llanto, enojarse, hacer un berrinche, pelear con los hermanos, discutir con los mayores y manifestar rabietas interminables.
Los cambios de humor a los 3 años se hacen aún más evidentes cuando los padres se dan cuenta de que dichas conductas detestables son vividas unicamente en su presencia, y que, llegado el caso, si el niño queda al cuidado de los abuelos o de otro familiar, su proceder parece ser envidiable, se portan bien y son flexibles, sin llanto y sin rabietas. ¿Cómo se entiende eso?.
Lo cierto es que los cambios de humor a los 3 años surgen a raíz de un fuerte proceso de modelación en la conducta, en la forma en la que el pequeño percibe el mundo. Los niños a esa edad comienzan a enfrentarse a temores cotidianos, a inseguridades, se debaten entre la necesidad del cuidado de sus padres y un sentimiento nato de rebeldia y autonomía que aún no es tal cosa.
Los niños a ésta edad también comienzan a sentir ansiedad e impaciencia, aún no han aprendido a esperar y en muchas ocasiones comienzan a ser concientes del dolor físico, tras un golpe, un raspón, una pelea con sus hermanos, entre otras cosas, por lo que el llanto vuelve a ser uno de los medios de comunicación más claros, como cuando eran más pequeños.
Los cambios de humor a los 3 años varían también según el individuo, muchos niños son extrovertidos y manifiestan cada unas de sus emociones, otros en cambio son mas introvertidos, y tras callarse pueden explotar en cualquier situación sin explicación aparente. Lo mejor en estos casos es que los padres traten de ayudarlos a que se expresen con mayor naturalidad.
Vía | Mia
Foto | Mendaronguraso
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Cambios de humor a los 3 años