En la vieja URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas) se realizaron vehículos muy especiales para distintos usos. Entre ellos estaba este camión con orugas que se llamó Bolotosnegojod B-1 Vitiaz. Fue creado por una oficina estatal de diseño.
El motor que lo impulsaba tenía una potencia de 148 HP y le permitía desplazarse a una velocidad de 27 kilómetros por hora. No era precisamente pensado para correr, sino para transitar por terrenos difíciles. Para eso contaba con orugas anchas de metal y goma.
La suspensión estaba balanceada y tenía una presión sobre el terreno de 0,09 kilogramos por centímetro cuadrado cuando se encontraba descargado. Con carga, podía transportar 3 toneladas, la presión era de 0,13 kilogramos por centímetro cuadrado.
El Bolotosnegojod B-1 Vitiaz había sido pensado para circular por caminos intransitables, como cubiertos de nieve, o un pantano, u obstáculos naturales. Siempre con cualquier carga en su caja. Hay que pensar que en la URSS había, y hay en la actualidad, lugares que son intransitables si no se cuenta con un vehículo de estas características. La fotografía apareció publicada en la revista Pulso número 67 del 19 de agosto de 1968.
Mauricio UldaneEditor de Archivo de autos
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