Por Santiago Ludueña
Después de sortear 7 vallas, una más difícil que la otra, de vuelta Las Leonas gritaron campeón mundial, con un 3 a 1 a las holandesas. Fue un partido donde no faltaron los sentimientos: desde la alegría hasta la incertidumbre, pasando por la emoción.
Las chicas comenzaron con todo: En los primeros 7 minutos, ya estabamos 2 a 0 arriba. Primero, fue una buena jugada entre Aymar y García, que terminó en un centro atrás de esta última a Rebecchi para anotar con el arco a su merced. Más tarde, hubo un gol de Barrionuevo de corner corto (ya empiezan a ser casi sinónimos). Luego, las argentinas bajaron un poco su nivel ofensivo: las naranjas empezaron a llegar al área. Primero fue un remate de Lammers atajado por Succi, luego un corner corto que Paumen desvió, y más tarde otra atajada de la arquera que milita en el CASI, tras un tiro de Welten.
El inicio del segundo tiempo fue, como diría Osvaldo Principi (que deje a Marley y vuelva al Boxeo), palo por palo: primero, un corto de Paumen que fue atajado magistralmente por Succi, y luego dos chances de Rebecchi para aumentar: primero, en un mano a mano, luego, en una jugada con Sole García. Pero en el minuto 9, llegó el susto: Paumen ratificó su efectividad en corners cortos y batió a nuestra arquera. Luego, hubo disparos de Lammers (Hol), Sruoga y García (Arg) que no terminaron en el arco. A 17 minutos del final, estalló el Mundialista, llenado por 15000 almas que querían ver la segunda consagración de Las Leonas: Carla Rebecchi agarra el rebote de un tiro de Sole (un mundial tremendo, lo único que le faltó fue el gol), y anota el tercer gol, el que terminaría sellando el marcador.
Más tarde, otra vez Belén Succi se mandó dos atajadas que fueron determinantes en el resultado. Muchos se preguntan por qué no fue elegida como la mejor arquera del mundial. Y después sonó la chicharra. Fue todo alegría para las albicelestes. Todos estaban llorando: las holandesas, de tristeza, por no poder retener la corona obtenida hace 4 años en España; en tanto que las argentinas, de la emoción que significó lograr otra estrella para el palmarés del equipo. Realmente, lo de este equipo fue fundamental. Todos, en mayor o menor medida, aportaron su granito de arena. Los lujos de Lucha, los corners cortos de Noe, la capacidad de asistir de Sole, los goles decisivos de Carla, las atajadas de Belén, el mando en la defensa de Claudia y Pity, las recuperaciones de Mariela y Mariana, la juventud de Delfi, la garra de Charito, y todo lo demás que aportaron Ale, Dani, Maca, Gisi, Romi, Maria Laura, y no se si me olvido de alguna más. Pero también fue fundamental la presencia del técnico que, podría ser considerado como un Rey Midas, ya que ganó todo lo que disputó con Las Leonas: 2 champions, y el mundial. Y a eso le sumamos el histórico tercer puesto en el champions masculino de 2008. No obstante, conserva algo de aquella filosofía que tiene el gran Cachito Vigil. Estamos hablando de Carlos “Chapa” Retegui, quien nos hizo contagiar su emoción.
Terminó el mundial. Se cumplió el sueño. Ahora, muchas de ellas volverán a sus vidas normales. Hasta que llegue el champions trophy de 2011.