Revista Cine
Contrariamente a lo que se piensa, por norma general los cementerios están despoblados de fantasmas. No sucede lo mismo en las televisiones, tribunas, revistas y demás foros. Aquí, lamentablemente, los fantasmas campan a sus anchas. En los camposantos, por el contrario, reina la paz, gobierna el silencio y vive la soledad (acompañada), tan necesaria en tantas ocasiones.
Siempre me han gustado mucho los cementerios. Aquí, en Galicia, tenemos una relación bastante especial con ellos. Cuentan que cuando Carlos III, a raíz de un brote de peste en Pasajes (País Vasco), promulgó la Real Cédula por la que se obligaba a todas las poblaciones a "trasladar" sus cementerios fuera de los núcleos urbanos (antes, el camposanto se extendía a los pies de las iglesias, en el mismo lugar en el que se celebraban romerías varias), aquí la medida no sentó nada bien. Los muertos han de estar cerca de sus familiares y nunca olvidados en lugares lejanos.
Más allá de las curiosidades históricas, siempre me ha llamado la atención la actividad que hay en torno a los nichos. Familiares y amigos, perpetuando ritos ancestrales, se empeñan en mantener vivos espacios que, con el tiempo, terminan por convertirse en altares, en neovanitas. Todo el "merchandaising" funerario surgido en torno al negocio de la muerte ayuda en ese sentido, un variopinto muestrario de objetos más o menos feos que varía en función del lugar en el que nos encontremos. El kitsch funerario, afortunadamente, existe, y aporta color y personalidad a unas tumbas que, si no fuera por estos distintivos, serían idénticas. Como en la vida, en la muerte también se busca la diferencia dentro del grupo de iguales.
También existe mucha belleza en los cementerios: sombras preciosas, imágenes poderosas, luces crepusculares, alegorías divinas, arquitecturas inmortales... un sinfín de estampas que me gusta congelar con la cámara.
Siento que mi presentación como fotógrafo amateur sea, precisamente, con tu tema tan macabro, pero estoy seguro de que seréis capaces de ver más allá del más allá y descubrir todo aquello que se esconde tras estas fotografías.
Feliz Halloween!!