Revista América Latina
Ciudadanía cree que proceso judicial de Javier Alvarado ha permitido demostrar que no hay jueces eficientes y que mantienen los malos hábitosEn la Cuna y Capital del Arte Negro, diversos sectores de la población exhortaron a los jueces actuar con más eficiencia y desterrar malos hábitos. Al referirse al proceso judicial que tiene el Presidente del Gobierno Regional de Lima (GORE LIMA), Javier Alvarado Gonzáles del Valle como ex alcalde del distrito de Lunahuana, la mayoría coincido en opinar que este ha servido para demostrar que los magistrados no son buenos ejecutivos de la administración de justicia, dispuestos a desterrar la corrupción y hacer del Poder Judicial una gestión eficiente.Otros fueron de la opinión que la política ha influenciado en los últimos años en el desprestigio de los jueces peruanos. Acotaron que existen magistrados que caen ante la tentación, por lo que se requiere fortalecer la idoneidad y probidad de los mismos y ser más minucioso en el proceso de su ratificación.“Más que fallas del sistema de justicia prima la tentación, la falta de capacitación que originan fallos ignominiosos (vergonzosos) que reflejan ignorancia y falta de probidad e idoneidad para administrar justicia”, recalcaron los más entendidos en la materia.En resumen se comentó que es difícil que un magistrado con quejas reiterativas, resoluciones sin sustento y que afronte denuncias por inconducta funcional pase el filtro de la ratificación.