Los caracoles terrestres, del grupo de los pulmonados, también van despertando de su letargo invernal, al igual que otros muchos animales. Así, en las zonas bajas de los concejos de Salas y Tineo podemos encontrar un buen número de ellos bastante activos, en especial cerca de los ríos y zonas húmedas. El mayor y más frecuente es el llamado caracol de huerta Helix aspersa, inconfundible y familiar para todos.
Otro caracol frecuente en toda Asturias es el caracol rayado; existen dos especies en Asturias, Cepaea nemoralis y Cepaea hortensis. Es muy difícil distinguirlas ya que ambas tienen un amplio polimorfismo, y conchas muy variadas en su aspecto. Para diferenciarlos se deben diseccionar, ya que sus organos internos son muy distintos.
Los caracoles terrestres son una parte esencial de las cadenas tróficas, ya que se alimentan de vegetales y son presa habitual de un gran número de vertebrados, sean estos reptiles, anfibios, aves o mamíferos.