Revista Diario
Carla tiene 11 años. Una sonrisa perfecta enmarcada por rizos rubios que ha sacado de su madre. Y unos ojos que se achinan al reír, como los de su padre. Carla es mi crítica más joven. Y me ha escrito esta reseña, la que veis sobre estas líneas. Dice que no debería haberse leído la novela - porque digo palabrotas (esa boca, Jomeini, habrá que moderarse) y porque hay muchas palabras que no entiende, tantas que se ha hecho un índice con ellas. Pero, a pesar de todo, a Carla le ha gustado mi libro. Y a mí mucho su reseña. Pero Carla no es la única Coca-cola - como llama mi tía a los que se sitúan entre los once y los trece años - con la que me he topado estos días. Hoy he ido a un colegio a hablar de Literatura a unos cien chavales de esas edades. Y me he divertido muchísimo. Sobre todo, porque me han frito a preguntas. Todo lo querían saber, los jodíos (Uy, a ver si Carla va a tener razón). Al final les he propuesto una lista de 20 libros que leer antes de los 20, que son: - El Quijote - El Principito - El diario de Anna Frank - La saga de Harry Potter - El niño con el pijama de rayas - Alicia en el país de las maravillas - El señor de los anillos - Orgullo y prejuicio - Los miserables - Frankestein - Oliver Twist - La historia interminable - Mujercitas - Cumbres borrascosas - Jane Eyre - Crónica de una muerte anunciada - Drácula - Sin noticias de Gurb - La isla del tesoro - Matilda Cada uno de ellos fue recibido por murmullos de aprobación y risas. Y me sorprendieron gratamente: la media de ellos había leído alrededor de diez de estos libros. Yo, como buena cuarentona, me he leído los 20. Dos veces.O más.