Carlos Roque Monzón (San Javier, 7 de agosto de 1942-Santa Rosa de Calchines, 8 de enero de 1995) fue un boxeador profesional argentino y femicida de Alicia Muñiz que también se desempeñó ocasionalmente como actor de cine, considerado por muchos especialistas como el máximo representante del boxeo argentino y uno de los mejores de la historia universal de esa práctica.
Alcanzó el título de campeón mundial de la categoría mediano a fines de 1970 y lo retuvo hasta su retiro, en 1977. En el primer ranking libra por libra de todos los tiempos del sitio web Boxrec fue ubicado en la posición 7. La revista The Ring lo ubicó en el número 11 de la lista de los mejores boxeadores históricos libra por libra. Mientras que, tras una nueva lista, la prestigiosa revista BoxRec lo ubicó, esta vez, en el tercer lugar entre los mejores boxeadores de todos los tiempos. En 1990 fue incorporado al Salón Internacional de la Fama del Boxeo.
El 14 de febrero de 1988, asesinó a su expareja, Alicia Muñiz, hecho por el que fue juzgado y condenado a once años de prisión por homicidio simple, dado que, por ese entonces, no existía un tratamiento especial para ese tipo de delitos. El hecho y el caso por asesinato marcó, en la sociedad argentina, el comienzo de la toma de conciencia sobre la violencia de género y el feminicidio.
Falleció en 1995, en un accidente automovilístico, en una salida transitoria que había obtenido en el marco de su condena.
Carlos Monzón nació en la localidad de San Javier, en la provincia de Santa Fe, el 7 de agosto de 1942. Fue el quinto hijo de Amalia Ledesma y Roque Monzón, de orígenes humildes y de ascendencia mocoví.
Monzón y sus padres, don Roque y doña Amalia, cuando ya era campeón del mundo.
En 1950 su familia, jaqueada por la pobreza, decidió mudarse de su ciudad natal emigrando a la ciudad de Santa Fe, afincándose en el populoso barrio «Barranquitas». Cuando se encontraba en el tercer grado de la educación primaria, abandonó los estudios para comenzar a trabajar y colaborar con el sustento familiar.
Carlos Monzón a los cuatro años, junto a su madre, padre, Inocencio, Alcides y Martha
" aria-describedby="caption-attachment-28246" data-orig-size="955,645" sizes="(max-width: 860px) 100vw, 860px" data-image-caption="Carlos Monzón a los cuatro años, junto a su madre, padre, Inocencio, Alcides y Martha
" data-image-title="" class="alignnone size-full wp-image-28246" data-orig-file="https://biografiasehistoria.files.wordpress.com/2023/02/b-boeste_el-personaje_01.jpg" data-attachment-id="28246" aperture="aperture" />Carlos Monzón a los cuatro años, junto a su madre, padre, Inocencio, Alcides y Martha
En este muy humilde rancho con piso de tierra donde nació Carlos Monzón.
Allí vivió hasta 1951, cuando la familia se mudó a la ciudad de Santa Fe.
Trabajó en lo que pudo, principalmente de lustrabotas en las calles, aprovechando los partidos de Colón y Unión, a los cuales concurría mucha gente, para tener una mayor ganancia. Como en Unión se enseñaba boxeo, fue allí donde se empezó a interesar en este deporte, y si bien era hincha de Colón esto no fue impedimento para que empezara a practicar esa disciplina. En su mente siempre estuvo la decisión de superar la pobreza y darle a su familia una mejor vida. Ya en su adolescencia y juventud trabajó como canillita (vendedor de diarios), sodero (repartidor de aguas gasificadas), lechero (repartidor de leche).
Monzón saluda a su madre
Amateurismo
Su primer combate en esta categoría fue el 2 de octubre de 1959 y el último, antes de hacerse profesional, el 12 de diciembre de 1962 como boxeador de peso medio. Su principal entrenador fue Amílcar Brusa, quien murió el 27 de octubre de 2011. Cuando lo conoció, tenía siete peleas como aficionado y había perdido dos; con don Amílcar hizo 80 peleas más como amateur.
Profesionalismo
El 6 de febrero de 1963 hizo su debut como profesional, al enfrentarse a Ramón Montenegro, a quien derrotó por nocaut.
Entre 1963 y 1964 sufrió algunas derrotas producto de su inexperiencia y la calidad de sus rivales, pero a partir de 1965 su suerte y su pericia para este deporte dieron un vuelco y todas fueron victorias.
El 1 de febrero de 1966 fue coronado campeón de peso mediano de su provincia, Santa Fe, y el 3 de septiembre del mismo año ganó su pelea en el famoso estadio porteño Luna Park contra Jorge Fernández, “El torito de Pompeya”, aguerrido boxeador de entonces, obteniendo el título de Campeón Argentino de Peso Mediano.
Después de ganarle a Jorge Fernández el título argentino levantó su casa ladrillo por ladrillo haciendo de constructor y albañil. Orgulloso y sonriente. Algo suyo, «de material» para que su familia tenga techo y piso de cemento.
Al año siguiente y frente al mismo pugilista obtuvo el cetro sudamericano de Peso Mediano.
Esto hizo que el mánager Juan Carlos Tito Lectoure, se fijara en él y comenzara a organizar eventos internacionales para foguearlo, en su mayoría contra pugilistas estadounidenses.
En 1970, el campeonato Sudamericano de los Medianos le abrió las puertas a disputar el cetro mundial que por entonces ostentaba el italiano Nino Benvenuti. La contienda se llevó a cabo en el Palazzo dello Sport de Roma el 7 de noviembre de 1970. En ella Monzón noqueó al campeón en el duodécimo asalto, obteniendo la corona mundial de peso mediano de la Asociación y el Consejo Mundial de Boxeo.
Imágenes de la histórica pelea de Carlos Monzón frente a Bennie Briscoe, realizada el 11 de noviembre de 1972 en el Luna Park. Se trató de una de las peleas más duras que tuvo que enfrentar el boxeador argentino en defensa de su título.
A partir de ese momento hizo 14 defensas de su título contra los grandes boxeadores de la época, ganándolas todas hasta su retiro en 1977, finalizando su carrera con 100 combates de los que solo perdió 3, los cuales fueron solo por decisión y esos rivales perderían frente a Monzón en revanchas.
El 9 de febrero de 1974, peleó con José Ángel «Mantequilla» Nápoles cuando este lo desafió por el título Medio, dado que era campeón Wélter, una pelea realizada en Mónaco y patrocinada por el actor francés Alain Delon.
En 1980 recibió el Premio Konex de Platino como el mejor boxeador de la historia en Argentina.
Actuación en cine
En el año 1974, el director y guionista de cine franco-argentino Daniel Tinayre, convocó a Monzón para protagonizar la película La Mary, junto a la actriz argentina Susana Giménez.
Carlos Monzón y Susana Giménez (a la derecha) junto con el resto del elenco
en la película La Mary en 1974
También participó en las películas Soñar, soñar, de Leonardo Favio; Amigos para la aventura y Las locuras del profesor, de Palito Ortega y Los hijos de López y Un loco en acción, de Enrique Dawi.
En Italia filmó La cuenta está saldada (1976), de Stelvio Massi, y el El macho (1977), de Marcello Andrei.
Vida personal
Carlos Monzón tuvo cinco hijos: el mayor, Carlos Alberto, con su primera pareja. Zulma Encarnación Torres, con la que convivieron entre 1958 y 1961;
Luego se casó con Mercedes Beatriz "Pelusa" García, con quien tuvo otros tres hijos y de quien se divorció en 1974.
Al poco tiempo nació Abel, el primer hijo del matrimonio Luego llegaría Silvia, la única hija, la preferida del padre. Y por último, el tercer hijo del matrimonio, Raúl Carlos, uno adoptivo, que llegó abruptamente, que Pelusa aceptó y educó y crió, aunque todos supusieran que era fruto de una aventura extramatrimonial del boxeador.
Silvia, la hija de Carlos Monzón, cuenta su historia.
También convivió con la conocida modelo, actriz, vedette y presentadora de televisión Susana Giménez, con quien comenzó la relación -que se extendió por casi cuatro años y lo llevó a divorciarse de su esposa- en 1974, durante el rodaje del film La Mary. Anteriormente ya había mantenido fugaces romances con vedettes como la inglesa Lynn Allison, Olga Mattano y Thelma Stefani.
Asesinato de su expareja
Se casó con Alicia Muñiz, en Miami, Estados Unidos, en 1981. En diciembre de ese mismo año nació Maximiliano, el único hijo de la pareja.
El día en el que Monzón mató a Alicia Muñiz
En febrero de 1988, Monzón vacacionó junto a su hijo en Mar del Plata, en la casa alquilada por su amigo Adrián “Facha” Martel, en una zona residencial. Hacía un mes que Alicia no veía a su hijo y Monzón le prometió entregarle al niño si ella iba a buscarlo. Ella estaba enojada y viajó convencida para pedir que Maxi viviera con ella en Uruguay, además de pedirle un aumento en la cuota alimentaria.
Muñiz llegó el sábado 13 a la casa ubicada en la calle Pedro Zanni 1567 y disfrutaron del día junto a Maxi, Martel y otros invitados. A la noche se dirigieron al club Peñarol para seguir festejando todos juntos.
A la madrugada del domingo tomaron un taxi para regresar al domicilio. Según las declaraciones de Rafael Crisanto Báez, un cartonero que estaba por la zona, la pelea comenzó antes de ingresar a la casa. Golpes, gritos y arañazos que terminaron con Alicia muerta.
En la primera declaración que hizo Monzón, dijo: “Nos caímos con Alicia del balcón. Tuve una discusión con mi señora, que se quiso tirar por el balcón, me agarró a mi y nos caímos los dos”. Su mentira se desvaneció con los resultados de la autopsia, que reflejaba que el boxeador había hecho “presión digital sobre el cuello hasta producirle un estado de inconsciencia”, para lanzarla luego intencionalmente al vacío en una actividad dirigida ostensiblemente, de manera directa y efectiva por su modalidad y desarrollo a lograr la muerte de la misma”.
El boxeador fue juzgado y declarado culpable en un juicio polémico y mediático, siendo condenado a 11 años de prisión por homicidio simple.
En cumplimiento de su condena fue alojado en el penal de Batán, cerca de Mar del Plata; luego en el de Junín y finalmente en el de Las Flores, en la ciudad de Santa Fe.
El caso fue paradigmático, porque puso en la consideración de la opinión pública la violencia machista, en tiempos en que no existía la figura legal de femicidio.
Accidente mortal
La famosa última foto de Carlos Monzón en vida, a minutos del accidente de tránsito que le arrebató la vida.
Cuando se encontraba en la etapa final de su condena, comenzó a gozar de salidas restringidas para trabajar. Una de sus ocupaciones era enseñar boxeo en el gimnasio de la Unión de Empleados Civiles (UPCN) en la ciudad de Santa Fe. Esa función también la cumplía en días de semana con boxeadores amateurs y profesionales, a quienes entrenaba bajo el régimen de salidas temporarias con obligación de regresar cada noche y dormir en el Penal.
Al regresar de una de esas salidas, tuvo un accidente automovilístico en el paraje Los Cerrillos de la ruta provincial 1, al noreste de Santa Rosa de Calchines (provincia de Santa Fe). La ruta presenta allí una muy larga recta que, en aquel momento, no tenía pintadas las líneas demarcatorias de las banquinas –muchas de ellas descalzadas, es decir, con una diferencia de altura entre el asfalto y la tierra–, ni del eje de calzada que separa a ambas manos.
En el kilómetro 51, el automóvil que conducía Monzón, a casi 140 km/h, realizó un movimiento inexplicable, ya que primero se desvió hacia la izquierda y luego hacia la derecha, por el carril en el que transitaba en dirección norte-sur. Tras morder la banquina con su rueda delantera derecha, el vehículo voló, dio casi siete tumbos, sobrepasó un zanjón de casi dos metros de ancho, arrancó de cuajo un ceibo y a unos 35 metros de la ruta detuvo su descontrolada marcha. Su muerte fue instantánea.
Reconocimiento
Monzón era querido y admirado por celebridades mundiales como Alain Delon, quien lo visitó en la cárcel de Las Flores, Mickey Rourke y muchos famosos más que le dieron su apoyo en momentos difíciles.
Fue invitado de honor en múltiples ocasiones en el programa de televisión de Nino Benvenuti, su antiguo rival. Benvenuti fue uno de sus defensores más leales, visitándolo en la cárcel varias veces, y pidiendo por su libertad. También lo acompañó su eterno y querido amigo Carlos «Chiquito» Uleriche, quien por años le brindó un lugar privilegiado en su comedor El Quincho de Chiquito.
Fue sepultado al día siguiente de su muerte en el cementerio municipal de Santa Fe, con la concurrencia de casi 60 000 personas.
Carlos Monzón es considerado uno de los más grandes y afamados deportistas de Argentina. A su retiro tenía el récord de 100 peleas como profesional, con 87 ganadas (59 antes del límite), 9 empates, solo 3 derrotas y 1 sin decisión.
Obras biográficas
La película documental Carlos Monzón, el segundo juicio (1996), de Gabriel Arbós, describe el lugar y los hechos procesales que provocaron el encarcelamiento del boxeador.
El 17 de junio de 2019, el canal Space estrenó la miniserie Monzón, producida por Disney Media Distribution Latin America y Pampa Film, que narra su vida, poniendo foco principalmente en la investigación del femicidio por el cual fue condenado.