Carlos “Pasión” Guevara y su vehemencia por las baquetas

En esta entrega de Rostros de Caracas para el proyecto editorial www.tuzonacaracas.com del Grupo UN, se reconoce el trabajo musical de uno de los mejores percusionistas del país

Foto: Adriana Parra

Leidy Parada Salinas | LParada@grupo-un.com.- Hace 28 años nació Carlos Daniel Guevara con artrogriposis congenita múltiple, un síndrome clínico que provoca deficiencia muscular y mala formación ósea. Es bajo y sus brazos fácilmente engañarían a cualquier persona, pues a nadie se le ocurriría pensar que aquel hombre, que ilumina el espacio con su sonrisa, es baterista y que en su pecho no cabe el amor que siente por la música, la musa que envuelve sus límites y los trasciende hacia entramados del alma.

Después de ver el solo de Matt Sorum en el concierto en Tokio de la banda Guns N’ Roses a través de la televisión, Guevara, mejor conocido como “Pasión”, entendió que su vida se escribiría con un par debaquetas. Comenzó en El Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela a los 12 años, luego de haber recibido su octava y última intervención quirúrgica y, desde entonces, se ha dedicado a desarrollar sus habilidades como percusionista, siendo uno de los mejores del país.

Oriundo de la parroquia El Valle, va por la vida con su ímpetu artístico. Siente que ya ha logrado muchas cosas, para él lo mejor del mundo es tocar heavy metal, género del rock que logra drenar sus energías y le exige una rutina más sistemática en relación con el quehacer diario de otros músicos.

Para ser baterista, se necesita coordinación y disciplina, se necesita un alto nivel de autoexigencia y paciencia. “Cuando se sabe qué es lo que se quiere, uno se dedica y no ve las limitaciones ni dificultades. Para ser profesional hay que estudiar todos los días… Las limitaciones están en la mente, por el miedo al fracaso, por cuestiones físicas, todo es mental. Todos tenemos miedo pero no debería existir, y si existe debemos combatirlo haciendo lo que más se ama”, expresa el concertista, quien diariamente estudia cuatro horas el instrumento.

Por su nivel musical, baterías Yamaha y baquetas Vic Firth son patrocinantes oficiales de su talento. En la actualidad es profesor y enseña a todo dar el aprendizaje del que se ha nutrido: “El Sistema para nosotros es todo, donde nos formamos y desarrollamos, donde tenemos la oportunidad de formar”. También es fundador de la orquesta de Rock Sinfónico “Simón Bolívar”, baterista de la Big Band Jazz y de la banda de heavy metal Hékura.