Carlos Ruiz Zafón es uno de mis escritores favoritos, o el que más.
Te engancha, te apasiona, te emociona y sobre todo, te hipnotiza. No hablo mucho de libros, pero la verdad es que leo mucho, y en verano mucho más (este mes me he leído ya dos libros y estoy leyendo otros dos a la vez :))
Abre mucho la mente. Os recomiendo que lo leáis si no lo habéis hecho aún, aunque La Sombra del viento es demasiado famosa y buena como para no haberla leído.
Para que lo conozcáis mejor, os dejo unas palabras de él mismo describiéndose:
Mi afición a los dragones viene de largo. Barcelona es ciudad de dragones, que adornan o vigilan muchas de sus fachadas, y me temo que yo soy uno de ellos. Quizás por eso, por solidaridad con el pequeño monstruo, hace ya muchos años que los colecciono y les ofrezco refugio en mi casa, dragonera al uso. Al día de hoy ya son más de 400 criaturas dragonas las que hacen mi censo, que aumenta cada mes. Además de haber nacido en el año, por supuesto, del dragón, mis vínculos con estas bestias verdes que respiran fuego son numerosos. Somos criaturas nocturnas, aficionadas a las tinieblas, no particularmente sociables, poco amigas de hidalgos y caballeros andantes y difíciles de conocer.
Una frase: Lo que escribes es lo que más se te parece.
Un lugar: Planeta Tierra.
Un plato: Mango Cheesecake.
Un viaje: Cualquiera que me lleve a un lugar desconocido.
Un atardecer: Playa de Carmel, en la costa central de California, el día de Navidad de 1999.
Una canción: Bagatella N 4 de Gerald Finzi.
Un juguete: El piano.
Una fobia: El esnobismo y la papaneteria mental.
Un héroe: Orson Welles.
Un cuadro: Cualquiera de las brumas doradas de J. W. Turner.
Un talismán: Mis recuerdos.
Una mala costumbre: Confiar algunas veces en quien sabes no debes confiar.
Y el libro que me he comprado hoy mismo, del 2011 pero que aún no había podido leer. ¿Lo habéis leído vosotros? Ahí va un videotrailer del mismo ;)