De pequeñas, la mayoría de las niñas soñamos con casarnos. Con los años, según vamos creciendo, vamos tomando nuestras propias decisiones y el querer o no casarse, tiene más que ver con el deseo real de hacerlo (o no hacerlo) que con el deseo social y familiar que se trata de imponer tan a menudo.
Yo, al respecto de esto, he pasado épocas de todo tipo. Primero quise casarme, luego me negaba en rotundo, más tarde me dio igual y ahora... sueño con hacerlo. Por eso, no puedo evitar seguir blogs como "Sí al sí quiero" e ir recopilando vestidos preciosos.
1. Celestina Agostino 2. Laure de Sagazan 3. Lanvin 4. Elise Hameau