Por Frater Ignatius
En ocasiones uno se encuentra con filmes prácticamente olvidados. Y algunos son tan despegados de la memoria que terminan por caer prácticamente en el rincón del olvido. Es el caso de esta película que se menciona en forma muy somera -como dato simplemente- en toda la web. Celos de Arcady Boytler, el mismo director de LA MUJER DEL PUERTO, es una de esas películas realmente dramáticas que tocan temas como la locura, los celos, la demencia y el suicidio. Filmada en 1936 por el cineasta ruso y protagonizada por Fernando Soler y un muy joven Arturo de Córdova, prefigura otra obra que llevaría a su fin años después Luis Buñuel: ÉL. Una hermosa actriz con aires de diva, Vilma Vidal, los acompaña con una actuación magistral. Vemos también a otro novicio que se convertiría con el tiempo en uno de los grandes directores de nuestro país: Emilio "el indio" Fernández. Existen ciertos vasos comunicantes en cuanto al estilo de filmación entre LA MUJER DEL PUERTO y la presente. El expresionismo alemán como impronta en la forma de filmar. El impresionismo francés en lo referente a las poses y las actitudes de los actores, además del tema. Un melodrama que tiende al drama puro sin ninguna concesión al humor, a la ironía o al sarcasmo. La forma en que Soler se va descomponiendo a partir de un cirujano de renombre que salva la vida de una desesperanzada mujer hasta llegar a ser un guiñapo del destino, sinceramente me dejó perplejo. Dicen que una de sus mejores actuaciones fue en LA OVEJA NEGRA. Empero, pienso que en ésta deja un histrión inolvidable. Nuestros ojos contemplan escenas casi surrealistas. Como ejemplo, tenemos la estancia del Doctor en el manicomio. Actuada con gente verdaderamente loca. Aparecen los chalados descaradamente, mostrándonos su descarnada realidad junto al gran actor coahuilense. Debemos decir que el sonido es deficiente y que la edición deja mucho que desear. Esos son los puntos flacos de la obra. Al igual que en la película de Andrea Palma, hace uso de recursos de cine mudo: las cortinillas, la exageración en los actores -es decir, el tremendismo-, ciertas poses en el manejo de los rostros y de la mímica en general. Contemplamos la filmación en exteriores, tanto en la noche como a pleno día pero con esa discontinuidad en el sonido y algunas tomas abruptas. La escena final es muy dura para la época. Lo que significa que al director le gustaban los temas fuertes, cargados de problemas tanto existenciales como psicológicos. Por último, deseo anotar algo que me pareció interesante: los primerísimos primeros planos a cada uno de los rostros del encuadre. Como en una especie de conjunto cuasi carnavalesco, el jefe de la obra se va regodeando en mirar las miradas de los figurantes: un erotismo salvaje en el indio; el arribo de la demencia en soler; la tristeza y el dolor en Vilma; la ecuanimidad y la decepción en Arturo de Córdova. Eso nos hace pensar en Dreyer. En fin, estamos ante una verdadera rareza fílmica, con un encanto que no se pierde a través del tiempo.
CelosDir: Arcady BoytlerCon: Fernando Soler, Arturo de Córdova, Vilma Vidal, Emilio Fernández, Andrés Soler.193679 min.