Revista Cine
Cinderella (Kenneth Branagh, 2015. EEUU): el norirlandés Branagh sigue aparcando sus adaptaciones de Shakespeare para ofrecer otro ejemplo de su polifacética labor como cineasta, firmando una lustrosa adaptación, a imagen real y muy fiel, del famoso cuento de hadas de Perrault ya inmortalmente llevado al cine por los estudios Disney más de medio siglo atrás, casa que vuelve a sustentar económicamente el proyecto. Manteniendo un notable apego por el animado y encantador clásico de los años 50, lucen especialmente una muy refinada Cate Blanchett como la perversa madastra, y su luminosísimo diseño de producción, así representados en gran parte de los clásicos Disney de antaño. El evidente anacronismo de su mensaje y de ciertos de sus temas no impiden que sea un divertimento a respetar, aunque se empieza a echar en falta otro proyecto shakespeariano del director de Frankenstein.