Revista Cultura y Ocio
Pronto diré adiós a la Facultad. Lejos están los días en los que empecé. Muchas cosas han cambiado, y seguirán haciéndolo. Mi percepción del mundo que nos rodea ha cambiado radicalmente, ahora sé cosas como el ciclo de materia y energía del nitrógeno, fíjate tú. Me quedan unos días de sufrimiento más, aderezados con algunos exámenes. Solo uno de ellos me preocupa, poco pero algo. Ha sido un año extraño, empezando por el dejar de asistir a clase por verlo una soberana estupidez a estas alturas. Para nada ayudaba ir a clase y ver como el profesor de turno se limitaba a leer unos apuntes. Eso lo puedo hacer yo también. He acabado bastante cansado del sistema, muchas cosas fallan. Si alzabas la voz para quejarte rápidamente los compañeros te reprendían. No querían que el statu quo se viese alterado. Por lo tanto hice mía esta filosofía de beneficiarse del sistema. No he ido a clase y ha sido el año que mejores resultados académicos he obtenido. Considero que es bastante triste que sea así. Pocos son los profesores que considero que me han enseñado algo, a ellos les doy las gracias. El día de mi cumple puede que diga que he tenido mi última experiencia de evaluación a nivel universitario. Podré decir que terminé la carrera el día de mi cumpleaños.Pronto diré adiós.