La Revista El Malpensante nos convoca en su último número a ver y observar los cerros de Bogotá y, al mismo tiempo a compartir en su página web, imágenes antiguas y nuevas que tengamos de ellos, desde diferentes ángulos y con diferentes colores.
En mi caso, como ex guardaparque (hijo de bióloga sale pintado y piantado) tengo algunas fotos de nuestras inoxidables montañas (aunque tan taladradas) que he compartido ya con los malpensantes. Los invito a unirse a esta campaña.