La Cuna de Campeones está dando la hora en la lucha contra el Covid-19 en el sur chico del Perú
El aislamiento social obligatorio y el desarrollo de los planes Esperanza y Tayta en la región Ica permitieron contener el avance de la pandemia del coronavirus en Chincha, convirtiéndola en la provincia con menor cantidad de contagiados y fallecidos en la región y en la primera en la que se logró levantar la cuarentena total, aseguró el asesor del MINSA, Marco Salazar.
Agregó que, con el descenso de las cifras, Chincha tiene más camas hospitalarias y UCI disponibles, lo que permite que pacientes de otras zonas de la región puedan tener acceso a ellas.
No obstante, el Dr. Salazar señaló que todas las ciudades tienen que seguir trabajando, respetando los protocolos de bioseguridad y siguiendo las recomendaciones dadas por el sector Salud para evitar los contagios y controlar la pandemia en toda la región.
Resaltó que tanto el Plan Esperanza como el Plan Tayta priorizan la atención primaria de la salud –despistaje, control y tratamiento– a los contagiados de la COVID-19. En el primer caso, la atención se realiza en grandes espacios, como colegios y estadios, siempre respetando la distancia social; y en el segundo, se propugna la atención casa por casa para proteger a los más vulnerables.
El asesor del MINSA manifestó que todas estas acciones, sumadas al uso adecuado de los recursos y al cumplimiento de las recomendaciones por parte de la población para evitar los contagios –uso de mascarillas, lavado de manos y distanciamiento social– han evitado el avance de los contagios en Chincha.
Precisó que esta situación no significa que se le ha ganado la batalla a la enfermedad, por lo que instó a toda la población a continuar con el trabajo para que las otras provincias de Ica avancen en la misma línea. Señaló que actualmente Nazca es la zona más afectada por la pandemia en la región, pero gracias al esfuerzo de la empresa privada pronto contará con su propia planta de oxígeno.