El siguiente esquema como todos los que aparecen en estas variaciones tienen su justificación última en el conjunto de equemas que vayan apareciendo, y por supuesto que permitan aclarar "lo que hacemos". Por tanto, las referencias etimológicas o históricas semánticas de tal o cual término no son más que los tributos necesarios por insertarse en un tipo de tradición. Pues bien tanto chresis como praxis significan ambos uso, empleo, utilización (con matices). Sin embargo, el empleo del primero está más asociado a Platón (a Foucault probablemente le debamos la atención actual a este término, sin embargo no sigo a Foucault ya que la finalidad que sigo es distinta a la de éste), y la equivocidad del término chresis es la de la equivocidad del término uso en tanto que puede ser atribuido a dos contextos distintos uno de tipo instrumental, y otro finalista. El instrumental es el que es susceptible de encontrar una regla clara que permita establecer el uso de tal o cual cosa. El contexto, pues, es el técnico o tecnológico (es esto lo que pretendemos mostrar). En Platón la distinción siempre es problemática y los ejemplos más claros son aquellos en los que la pregunta por el saber hacer que hace Sócrates, siempre oscila entre contextos técnicos y otros pragmáticos (a falta de un término mejor para referirse al uso finalista), y esto es así desde la Apología de Sócrates cuando éste pregunta a artesanos, poetas, políticos para refutar en última instancia a los sofistas. El término praxis que debemos a Aristóteles definitivamente desliga el contexto técnico del pragmático en la medida que depende de la diferencia que establece entre "lo que es necesario", y "lo que puede ser de otra manera".Pero nuestra interpretación no coincide ni con la de Platón ni con la de Aristóteles, sin embargo, las claves de la misma no necesitan ir más allá de estos autores sino repensarlos y combinar algunos de los elementos de ambos. La diferencia entre ellos y nosotros es la tecno - logía. Lo que de logos tiene la técnica es exactamente lo mismo que la expresión que se supone estaba en la entrada de la Academia "que no entre nadie que no sepa geometría".
De este modo el uso técnico o chresis es lo que hoy en día sería el manual de instrucciones que acompaña a cualquier artefacto técnico, que asegura un uso co - recto. Además este tipo de uso es el que se refiere a toda utilización de instrumentos para construir algo lo más eficientemente posible. La mecanización de los procesos de producción señala esta tendencia del uso instrumental. Pero el uso final de los productos no puede estar recogidos en el manual de instrucciones, porque hay un uso que puede ser de otra manera, y esto es a lo que se refería Aristóteles cuando se refería a los conocimientos práxicos. El ejemplo que no puedo dejar de utilizar es el del puente. La construcción del puente eficientemente pasa por el férreo control técnico de todo lo que interviene en la construcción, pero el uso final no está incluido en todos los procedimientos que lleva a cabo su producción, sino que se decide en un ámbito abierto. Por tanto, chresis remite a un uso que ha de garantizar una cancelación, un cierre, y la praxis por el contrario no admite más que cancelaciones o cierres parciales.Las relaciones que podemos establecer entre ambos usos son más complejas que las aquí esbozadas, y dependen de la complejidad de cada ámbito. Por ejemplo, el uso técnico lo que entendemos por chresis ha ido apareciendo lentamente a lo largo de la historia, ya que estaba envuelto en los mismos procesos de producción. De ahí que los herreros en la antigüedad, o los albañiles de las catedrales en la baja edad media cubrieran de un halo de misterio a sus tareas. La ciencia aplicada a la técnica, se quiera o no es una vuelta en cierto sentido de Platón, a un mundo más realista en lo político que es aristotélico.