
Desde este momento su vida nunca volverá a ser igual, y a lo largo de la serie seremos testigos de cómo esta nueva situación afecta a sus relaciones con viejos amigos como Morgan, su familia, empleados de la tienda y nuevos compañeros (los distinguidos Sarah y Casey). Así, poco a poco conocemos a un grupo de personajes de gran corazón, cada uno con sus peculiaridades pero siempre dispuestos a hacernos reír ya sea en situaciones cotidianas o en las más disparatadas.Y es que Chuck resulta una comedia de enredos brillantemente construida, en la que todo se complica cada vez más de forma inesperada; fresca y bien interpretada, que incluso cuenta con cameos de otros actores del mundo de las series como Dominic Monaghan (alias Charlie en Perdidos) o el antiguo padre de Cosas de casa.Además, no le faltan momentos tan emotivos como el que acompaña a estas líneas (no me impactaban tanto desde que descubriera los primeros episodios de Cómo conocí a vuestra madre) y que, a la espera del estreno de su tercera temporada a comienzos del próximo año, hacen de Chuck una serie de lo más recomendable.