Descubrimiento de los rayos XCuando Wilhelm Röntgen empezó sus experimentos con el tubo catódico a finales del s. XIX no podía imaginar que su trabajo iba a revolucionar de inmediato varios campos de la ciencia, especialmente de la medicina. Al igual que ha sucedido con otros grandes descubrimientos de la humanidad el azar jugó un papel crucial en este caso.


Pese a que la gran mayoría declararon que el cuadro original era el del Louvre, Sir Duveen perdió el pleito ya que la altanería de los expertos que basaban su opinión en sus impresiones sin apoyarse en evidencias científicas no convenció al jurado americano cuyos miembros no tenían conocimiento alguno de arte. Paradójicamente, se había realizado una radiografía de la obra del Louvre que mostraba numerosas modificaciones en el proceso de composición (pentimenti) que evidenciaban su originalidad. De todos modos, el hecho de que la técnica todavía no estuviese suficientemente avanzada y que el propio Duveen no confiase en los métodos científicos supuso que no se le diese importancia durante el juicio. Hoy en día se considera que la obra del matrimonio Hahn es una copia francesa más tardía mientras que la obra del Louvre se le atribuye a Leonardo o a uno de sus alumnos. En cualquier caso, este juicio supuso un antes y un después en la autentificación de obras de arte ya que por primera vez los expertos tuvieron a su alcance rigurosas pruebas científicas.Dos cuadros de Van Gogh en un solo lienzoLa autenticidad del cuadro Naturaleza muerta floral con amapolas y rosas estaba en entredicho desde que el museo Kröller-Müller holandés lo añadiese a su la colección en 1974. De hecho, el cuadro fue considerado como anónimo en 2003 tras un profundo estudio ya que había varios indicios como el excesivo tamaño del lienzo, la posición de la firma y el abultado grosor de la capa pictórica impropios del estilo deVicent van Gogh. Pero una vez más los avances científicos permitieron esclarecer la verdad: en 2012, gracias a una innovadora técnica de rayos X, se obtuvo una imagen extraordinaria de una pintura subyacente.
Este dibujo oculto muestra a dos hombres semidesnudos peleando, lo que concuerda con una carta que Van Gogh escribió a su hermano Theo a principios de 1886, en la que le cuenta que se había pintado el torso desnudo de dos luchadores. Precisamente, la imagen que se puede observar gracias a los rayos X. En aquella época el pintor holandés se encontraba en Amberes realizando un curso y en la escuela se usaban lienzos del tamaño de la obra (100x80cm) lo que justifica que ésta sea mayor que otras del artista. Reutilizar lienzos era una costumbre bastante extendida en la época y este es el motivo de que Van Gogh emplease un trazo más grueso en esta obra.Picasso: Vida y muerte en el mismo cuadroEl cuadro La vie (1903) de Picasso es un claro ejemplo del complejo entramado que se puede encontrar bajo una obra preparada para observarse en dos dimensiones. Este óleo nos muestra una pareja de amantes en lo que se ha interpretado como una complejísima alegoría al amor profano o a un simbólico ciclo de la vida.

El amante es Carlos Casagemas, compañero de juventud de Picasso que, tras un desengaño amoroso y un intento fallido de asesinar a Germaine (la amante), se suicidó. La muerte de este amigo impactó terriblemente a Picasso que se sumió en el conocido como periodo azul durante el cual realizó varias obras en su honor, entre ellas la que nos ocupa. Pero tras esta imagen superficial, de por sí abierta a múltiples interpretaciones, se esconde un trasfondo muchísimo más profundo. Pues bien, el examen científico ha demostrado ser de gran utilidad en esta misión.La radiografía realizada en 1978 en el museo de arte de Cleveland donde se encuentra el cuadro mostró un dibujo previo muy diferente al final y numerosos pentimenti. Lo que sabemos a ciencia cierta gracias a los rayos X es que toda esta composición fue pintada encima de otra obra anterior expuesta por un jovencísimo Picasso en la Exposición Universal de Paris en 1900. Así, además de descubrir el proceso creativo de la obra, la radiografía permitió localizar una obra que se creía perdida. No deja de ser paradójico que Picasso pintase La vida sobre una obra de temática mortuoria que le había unido a su amigo Casagemas en el viaje a París.F.J.de C.Madrid, 18 de noviembre de 2.015
Nota: Resumen de artículo publicado en “Naukas.com” por el investigador postdoctoral en Química Analítica Dr. O. González.