Alice Roberts, profesora de Anatomía y Antropología de la Universidad de Bristol, en el Reino Unido, ha desarrollado un modelo de cómo sería la evolución del cuerpo de una mujer en el futuro.
El resultado lejos está de los estándares de belleza convencionales, y hace anclaje fundamentalmente, en cómo sería un cuerpo femenino adaptado a un medio ambiente probablemente hostil, sumándole algunas modificaciones físicas y genéticas.
El aspecto de esta mujer lejos está de los estándares de belleza actuales. Fotos: Science Museum
La exhibición se llama Making the ‘Perfect Body’ (creando el cuerpo perfecto), y fue inicialmente una propuesta de Roger Highfield, Director del Science Museum, quien le pidió a Alice Roberts que se imagine cómo sería la evolución del cuerpo femenino, y que en base a supuestos, haga modificaciones genéticas, físicas y evolutivas.
“Quizá fue una de las solicitudes más extrañas que he tenido que hacer para mostrar que el diseño del cuerpo humano, aunque es maravilloso, está limitado por su historia y composición genética“, expresó Roberts en una entrevista para la página del Science Museum.
Con respecto a la inspiración para el modelo, ella dijo: “El punto de partida fui yo : mi cuerpo de cuarenta y cuatro años, un poco áspero y bastante menos que perfecto. Me sometí a un escaneo sabiendo que el ‘yo’ virtual se transformaría, tal vez más allá de todo reconocimiento”.
La premisa fue pensar en cómo sería un cuerpo adaptado a un medio hostil del futuro y que posea ‘mejoras’ genéticas. Fotos: Science Museum
Roberts decidió que esta ‘supermujer’ estaría alejada de los estándares actuales de belleza pero contaría con habilidades útiles para afrontar trastornos físicos. Según la científica, el cuerpo humano es bastante vulnerable a causa de las distintas enfermedades que van surgiendo y mutando.
En la creación del modelo optó por piel anfibia que cambia instantáneamente de claro a oscuro para dejar pasar la luz o para bloquear los rayos ultravioleta que suelen acelerar el envejecimiento y provocar cáncer de piel.
También decidió desarrollarla con un corazón provisto de más arterias que el de un ser humano actual.
Le colocó pulmones más eficientes, ojos sin puntos ciegos, oídos que captan mejor el sonido y piernas más ‘útiles’. Y por supuesto, agregó esta bolsa similar a la de los canguros para transportar a sus crías, y para que también la gestación se produzca dentro de ellas al igual que lo hacen los marsupiales.
¿Qué te parece esta ‘supermujer’ del futuro? ¿Qué modificaciones genéticas le agregarías tú? Envíanos tus comentarios.
@laraenlatierra
Fuente de información: es-us.vida-estilo.yahoo.com