El amarillo básico 1, un colorante utilizado en los laboratorios de todo el mundo para detectar las proteínas dañadas en la enfermedad de Alzheimer, ha resultado ser un medicamento milagroso, al menos para los gusanos. El tinte, también conocido como Tioflavina T (THT), prolongó la vida de un grupo de pequeños nematodos alrededor de un 60%, un porcentaje impresionante, y consiguió ralentizar el proceso de degeneración en los animales criados para imitar los aspectos del alzheimer.
La investigación, que aparece publicada en la revista Nature, podría abrir nuevas vías en la lucha contra el envejecimiento y las enfermedades relacionadas con la edad.El estudio, llevado a cabo por el Instituto Buck de Investigación sobre el Envejecimiento en California (EE.UU.), se centra en la habilidad que tiene el organismo para mantener la estructura apropiada y el equilibrio de sus proteínas, consideradas los bloques básicos de la vida.
Hemos estado buscando compuestos que retrasan el envejecimiento durante más de diez años y el Thioflavin es lo mejor que hemos visto hasta ahora, afirma Gordon Lithgow, responsable de la investigación. A su juicio, el colorante reúne tres conceptos cruciales en la búsqueda de compuestos que podrían prolongar los años de vida saludable.Nos permite manipular el proceso de envejecimiento, tiene el potencial de ser activo en varios estados de la enfermedad y mejora la capacidad innata de los animales para hacer frente a los cambios en sus proteínas.