Revista Psicología

Cinco relatos

Por Blogsmtenerife

Estos son los cinco relatos que algunos de los miembros del taller del blog elaboraron durante el minitaller de creación literaria que tuvo lugar en nuestra unidad la semana pasada:

“Mis padres” de Ca. Aquí empieza mi historia. Soy una niña en la playa que está jugando con sus padres en el agua. Estoy jugando con mi flotador. Me estaba divirtiendo, uno rojo y gordito. Era una playa con piedra y el agua jugaba con el cubito del agua. Es una playa que está en Tabaiba Roja, se llega por un túnel en el que hay graffitis con colores, palabras y al salir hay yates que me gustan mucho pero lo que más me gustaba eran mi padres porque me querían mucho y yo a ellos también.

“El sortilegio de la Locura” de C.R.G.A.
 Ella estaba asustadísima. Estaba en el instituto pensando ¡¿pero qué es eso?! Voy por la calle y también las oigo, ¿irán saltando por los edificios?, pensaba por el puente Zurita de camino a clase.¿Son espíritus?, como los que ví con once años, un rayo eléctrico que salió del techo, o como lo que ví en el espejo a los 16, una mujer deformada en el espejo. Al final me puse nerviosa, de mi habitación al cuarto de mi madre se oyeron cientos de gritos en mi cabeza diciendo: ¿no sabe lo que le queremos hacer?, ¿cuál de ellas quieres?, refiriéndose a mis hermanas. Muy intranquila se lo conté a mi madre. Alguien se metió a hacer telepatía en casa. De ese momento hasta hoy, han pasado 20 años.

“ No fue en verano” de J.A.C.D. Llegaba el inverno, yo no había descubierto la sensación que aquella chica me trasmitía. En el transcurso de mi existencia tuve el apego con otras chicas, pero la sensación era diferente, sólo tenía catorce años, estaba empezando a despertar en este terreno. Me cambió, me quitó de la mente todo el sufrimiento que había sido mi infancia. Estaba preparando mi examen de ingreso en el conservatorio de música y soñaba con que me haría un gran compositor y aquella chica y yo íbamos a revolucionar el grupo musical al que pertenecíamos, y todo iba a ser valorado por los expertos críticos como un revelación. Fue muy corto el periodo de sueños. Cuando todo aquello terminó porque le ví con otro chico, volví a sentirme hundido, tenía apatía y desgana, poco a poco empecé a vivir la etapa más amarga de mi vida. Cuando me dieron los resultados positivos de mi examen en el conservatorio empezó otra etapa en la cual aquella visión que tenía, me di cuenta que era una ficción, me empecé a mezclar con auténticos profesionales y caí en una realidad que me trasmitía que con el esfuerzo podía conseguir estar en aquel sueño que viví, con o sin esa persona, solo o no.De mi primera relación amorosa aprendí que la pasión loca te hace soñar y en esta vida que vivimos los sueños son para los niños, más  que ello tenemos que ponernos metas a corto o largo plazo, que en un mundo real será lo que nos haga superarnos, y en los momentos de descanso podemos soñar. Pero fue un bonito sueño.
“La incertidumbre” de J.H.P. Un frío cortante, cuerpo helado con mi metro diez de estatura, cinco años aproximadamente; sí, había llegado a Madrid. Sensación un poco extraña debido a que jamás había salido de Tenerife, gracias a mi madre que como de un lazarillo se tratara a día de hoy se lo agradezco en el alma. Ella me ayudó a guiarme, de aquí lo del lazarillo, no sé por qué me reitero tanto pero me hace sentir bien. La llegada a Madrid tiene un sentido, estaba enfermo con diagnóstico de poliposis intestinal, la confianza en el HUC se perdió al no dar los especialistas con mi patología. Mi madre, Goya, toma la decisión o alternativa de cambiar de aires y probar con un poco de suerte y fortuna. De manera que mi salvación pasó por las manos de varios médicos y afortunadamente a día de hoy estoy bien de salud aunque con un leve contratiempo cuyo nombre es: trastorno psicótico. “El cosquilleo” de L.H. Estaba en las rocas de un acantilado cogiendo el sol echado  sintiendo el calor no sólo el del sol que te da de frente sino el calor que desprenden las mismas rocas que han absorbido ese calor que ahora estoy sintiendo absorbiéndose sobre mi cuerpo, te penetraba sobre la epidermis y se iba perdiendo poco a poco dentro de ti. Luego desaparecía y volvía otra vez a la piel para fundirse de nuevo en mi interior, a continuación sentía lo bueno que sería sentir el agua fresca en mi cuerpo después de haber sentido ese calor en él pues me subía a la roca más alta de todas y me tiraba de cabeza, sentía como el agua fresca, en el momento en que el cuerpo chocaba con el agua, poco a poco refrigeraba mi cuerpo entero, de la cabeza a los pies, un cosquilleo. Sólo faltaba el pequeño humo saliendo de mi cuerpo y uniéndose al aire, con un pequeño resquicio de los vientos alisios soplando como una pequeña brisa, que agradaba el perfecto momento que estaba pasando

Volver a la Portada de Logo Paperblog