¿Qué demonios pasó con Birds of Prey? Después de todas las basuras de superhéroes que han sido taquillazos en cartelera y bien recibidos en crítica, nos encontramos con que a la cinta de Cathy Yan le cayeron palos hasta en el carnet de identidad. La acusaron de ser una "panfletada feminista" (?) que pecaba de tonta y de frívola. Y yo me pregunto... ¿estamos tontos? ¿Por fin estrenan una película de superhéroes gamberra y divertida, y la criticamos por los motivos equivocados?
Creo que resulta evidente que el objetivo de Birds of Prey no era ser una película especialmente trascendental filosóficamente hablando. Cathy Yan no quería hacer una Interstellar ni una Gone Girls ni pijos ni capullos. Lo que Cathy Yan quería hacer, a mi entender, era una película traviesa y divertidísima llena de violencia, de colores y de purpurina, y eso es exactamente lo que nos dio. Criticarla por cualquier otro motivo sería como pedirle peras al olmo.
Tres eran los grandes pilares que tenía Birds of Prey: la protagonista, el villano y el grupo de "vengadoras". En los dos primeros casos tuvimos grandes aciertos, pues Margot Robbie y Ewan McGregor son bestias de la interpretación que se comían la pantalla. Si se le podría criticar algo a la película con más razón, sería la falta de química entre las protagonistas. O, más que falta de química, falta de tiempo para desarrollar un grupo realmente potente. Y, a pesar de ello, la mayoría de esos pilares funcionan y sostienen muy bien la película.
¿Alguien duda de que si hubiéramos tenido personajes como los de Robbie y McGregor en otra película de superhéroes más "para machos", hubieran tenido mejores críticas? Pues claro que no. Nadie lo duda. El problema de Birds of Prey es que la gente le ha cogido una manía que te mueres. Cuando la vi en cines lo pasé genial, riéndome media película y estremeciéndome con algunas partes, y no pude entender esa avalancha de odio que recibió después.
El doble rasero a la hora de reseñar películas
Pero cómo son las cosas, vaya, vaya, que nos encontramos con que secuelas mediocres como Bienvenidos a Zombienland 2 o Deadpool 2, que tienen un tufo que echa para atrás, recibieron mejor puntuación y críticas más positivas. Y puedo atestiguar de primera mano que en ambos casos me sacaron un par de risas como mucho. Pero llega Birds of Prey, que es fresca y cabrona y tiene un trasfondo psicológico bien trazado, y la gente empieza a gruñir que "si fiminismi" y que si historias. ¿A quién le importa eso? La película no es brillantísima, cierto es, pero a mi parecer es evidente que las críticas son desproporcionadamente negativas por el hecho de que los machotes no han tolerado una película de superhéroes en clave femenina. Muchos ni se molestaron en ir a verla.
Lo que tanto me molesta de que se la haya criticado por su "rollo feminista de pandereta" es que nos estamos desviando del quid de la cuestión: es una película con muchas luces que va más allá del mensaje político y que habría recibido, sin duda, una recepción más positiva de haber sido protagonizada por hombres. Las locuras de Harley Quinn, su historia de amor con ese bocadillo, serían genialidades graciosísimas, el festival del humor, si las hubiera vivido Deadpool. ¡Pero, oh, es que las mujeres tienen menos gracia! Anda y váyanse a cagar. Una película de superhéroes que por fin tolero y me la tenéis que criticar por todos estos motivos sin sentido.
Que se critique a Birds of Prey por chapuzas del guion o del desarrollo de personajes, en definitiva, me parece genial -merece algunas de esas críticas-, pero que el 90% de sus críticas consistan en "fiminismi" y "las mujeres nos quieren castrar ahora a los hombres, mimimi", me parece jodidamente asqueroso e impertinente. Son críticas que manchan una película por las razones equivocadas. Y una obra tan simpática y gamberra como Birds of Prey merece mucho más, y mejor, que eso.
Isidro López (@Drolope)
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