LUCKY (ÍDEM, EU, 2017)Cuando llevaba una hora de película me sentía atrapado por esta historia sobre un vaquero de noventa años que estaba descubriendo su mortalidad, en especial por esa magnifica actuación de despedida de la leyenda Harry Dean Stanton que nos deslumbra y oprime el corazón cada vez que aparece, pero que también admiramos y nos saca carcajadas con su clara visión de la vida, por otro lado los extraordinarios secundarios que desfilaban sin parar regalándonos sorpresas y talento, por un guion inteligente y pausado y finalmente por la novel dirección de John Carroll Lynch que parece tener décadas dirigiendo, siempre pulcro, con clase y mucho talento en los planos y colores. Como apunte la cinta me había ganado pero lo que sucede en la media hora final es tan maravilloso que no pude contener las lagrimas y las sonrisas al ver como cada fotograma estaba impregnado con un alma que traspasa la pantalla, donde una persona descubre que su vida en crepúsculo valió mucho la pena y que solo queda sonreír frente al inevitable final.
Lucky (magnifico Harry Dean Stanton ninguneado por todos) es un vaquero de noventa años que sigue estando en forma debido a que se levanta haciendo ejercicio y bebiendo religiosamente sus vasos de leche fría, el tipo tiene la misma rutina, va al mismo café donde resuelve crucigramas y camina por todo el pueblo maldiciendo cierto lugar, ve sus programas de concursos siempre y cuando sean de conocimiento, y visitando por las noches un bar donde convive, en cierta manera, con sus dueños, el barman y los clientes asiduos entre los que esta el extravagante Howard (exquisito David Lynch casi haciendo un personaje sacado de sus mundos) que perdio su tortuga y esta deprimido, y claro le dejara todo en herencia, el mundo de Lucky transcurre siempre igual, en una rutina interminable hasta que un dia simplemente se cae porque si, piensa que tiene algo, despues de todo es un fumador compulsivo pero esta completamente sano, la respuesta del doctor es que esta viejo y todo llega a su final.
Esta situacion saca de noción a Lucky que aunque sigue la rutina inevitablemente se comporta de diferente manera, intenta pelearse con un abogado y visiona el infierno, recuerda una terrible vivencia infantil, y se pierde cuidando sus jardín, es decir el descubrimiento de que su vida se agota lo agobia de manera terrible porque no sabe como reaccionar, pero aun asi no se rinde, se da oportunidad de conocer a sus compañeros, busca mascotas, intente enmendarse sin traicionar su esencia y por supuesto encuentra a ese veterano (Tom Skerritt, muy bien) de la segunda guerra mundial que al igual que él recuerda con respeto, orgullo y amargura ese episodio y donde comprende que a la vida solo se le puede sonreír, que el karma le llega a todos, que a veces debe darse oportunidades, y que culmina con una fiesta mexicana donde florece su amor por el mariachi y canta "Volver, Volver" sin gran voz pero con toda el alma, me sigue maravillando como los extranjeros parecen valorar y amar mas nuestra cultura que nosotros mismos, para regalarnos una ultima enseñanza en ese desvarió que tuvo en el bar, la verdad importa y solo queda sonreír. Extraordinaria cinta que resume la vida de manera excelsa, la vida es tan bella como nosotros queremos que sea, y el talento vale tanto de joven como de viejo, Dean Stanton se luce, nos estruja el alma y nos sorprende haciendo ejercicio y siendo tan divertido como triste, ademas la cinta sirve como despedida y homenaje a los personajes que realizo y a él mismo como se nota en las muchas vivencias que Lucky y el comparten, dos personajes, dos leyendas.
Calificación: Muy Bien