Voy a contarte un anécdota que me ha pasado, creo que tiene mucho que ver con calmar la ansiedad naturalmente y aliviar la mente de pensamientos negativos.
Me he sorprendido! Me he dado cuenta de que tenemos un reloj interno en el cuerpo, que es totalmente preciso incluso con los minutos. Me explico: Hago una tarea durante el día que me encanta hacer, se trata de escribir un artículo de auto ayuda diario. Cómo no tengo mucho tiempo, he decidido que antes de salir de casa para ir a trabajar, me pongo a escribirlo.
Te seré sincero, a mí siempre me ha costado mucho levantarme por las mañanas para salir a trabajar. Pero ahora, desde que lo hago para hacer lo que a mí me gusta, me despierto el 70% de las veces 5 minutos antes de que me suene el despertador!
Increíble, te aseguro que normalmente necesitaba unas 15 repeticiones de alarma (o más) para poner un pie fuera de la cama.
¿A qué se debe esto?
Bueno, estamos hablando de pasión, estamos hablando de pensamientos positivos, estamos hablando de entusiasmo. Cuando el entusiasmo entra en tu mente, se convierte en una energía totalmente activa y positiva. Naturalmente si tu cuerpo emana entusiasmo, puedes calmar la ansiedad naturalmente y sin necesidad de medicamentos ni ejercicios específicos.
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La clave para no tener que estar pendiente de calmar tu ansiedad, es hacer cosas que te gustan. Las cosas que te gusta hacer, te proporcionan un estímulo positivo, y convierten a tu mente en un instrumento que busca sin descanso la manera de no perderse esa situación por nada.
En mi caso, he notado cómo mis ganas de levantarme de la cama nacen naturalmente, y me avisan puntualmente de la hora que es. Pero hay muchas otras formas que el cuerpo tiene para desarrollar habilidades nuevas, siempre que lo incites a hacer cosas agradables para ti.
Haz esta prueba:
1- Busca cosas que te cueste mucho hacer por pereza o falta de ganas. Puede ser levantarte por la mañana, ir a acompañar a tu pareja a comprar algo para él, etc… Cosas que te den pereza normalmente.
2- A estas situaciones añádele un ingrediente que te guste hacer. Por ejemplo, hacer algo que antes de ir a trabajar. O proponerte encontrar algo en una tienda, mientras acompañas a tu pareja a que se pruebe ropa.
3- Si lo pones como una meta, verás que ahora la situación de pereza cambia totalmente y se convierte en un plan nuevo y agradable. Tu cuerpo y mente se ponen en marcha para no hacerte sentir pereza, y para empujarte hacia lo que te gusta hacer.
Esta es una clave para no sentir nervios en el día a día. Las acciones agradables te atraen, no necesitas calmar la ansiedad cuando tu voluntad se cumple naturalmente.
Gracias. – DiegoCG. Escritor de la guía:
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