Coaching para curar las penas del corazón

Las penas de amor duelen mucho al principio, tanto que bajo la perspectiva de una decepción reciente parece imposible superar ese bache. Sin embargo, la experiencia humana muestra que afortunadamente, todo pasa, el dolor se calma y lo que parece imposible de olvidar, se convierte en un mero recuerdo del ayer.

¿Cómo curar las penas del amor y aliviar las heridas?

1. En primer lugar, asume el dolor como algo totalmente natural después de haber sufrido una ruptura de pareja, un abandono inesperado, una infidelidad o problemas graves de pareja. En una situación así, es importante que no reprimas tus sentimientos y hables del tema con alguien de confianza porque hablar de cómo te sientes te ayudará a sacar fuera aquello que llevas dentro.

2. Cuida de ti. Disfruta de pequeños placeres en la vida diaria: una buena alimentación, pequeños regalos culinarios, un baño relajante y tranquilo, un buen masaje, planes caseros con amigos… La tranquilidad aporta bienestar a nivel emocional en un momento en que necesitas recuperar fuerzas.

3. Da las gracias a tu pasado ya que precisamente por todas las vivencias que has acumulado en tu corazón has llegado hasta aquí hoy. Después de un desamor suele costar mucho ver lo bueno de la historia pero con el paso del tiempo lograrás ver con más perspectiva la situación. Un desamor siempre es una fuente de aprendizaje importante.

4. Es aconsejable que evites tener contacto con la persona que quieres olvidar. Si sigues teniendo un contacto regular, en cierta forma, sigues pegado a ese pasado. Corta también el contacto a través de las redes sociales.

5. Escribe una carta dirigida a tu ex pero no la envíes. Escribe todo lo que necesites decir, todo aquello que se te ha quedado guardado dentro. Te servirá para desahogarte. Llora todo lo que necesites para sanar tus heridas. Después quémala y deja que el agua se lleve las cenizas. Te sentirás limpia/o y renovada/o.

6. Practica tus aficiones y disfruta de aquellas actividades que te gustan. Tener una afición es muy gratificante. Sumas ilusión y vitalidad a tu vida.

7. Puedes aliviar tu dolor poniendo tu atención en las cosas buenas que tienes: una familia, buenos amigos, salud, un trabajo… Existen muchas razones por las que eres una persona afortunada. Y si no me crees, empieza a preparar una lista. Tu mismo/a te sorprenderás.

8. El tiempo todo lo cura. Con el paso de las semanas te sentirás mejor. Si escribes en un diario tus pensamientos y sentimientos podrás valorar tu evolución. Un día al irte a acostar te darás cuenta de que hoy no pensaste en tu expareja en todo el día. Habrá sido el primer día de una nueva etapa.

Maite Nicuesa Guelbenzu para 3Contigo Coaching.