En Italia ha sido un año muy duro y de mucha agitación política, económica y religiosa. La gente ha sufrido mucho y lo ha pasado mal en algunos momentos. McCann-Erickson es consciente, y por eso ha querido sacarle una pequeña sonrisa a la población italiana en una nueva campaña de Coca-Cola.
Los creativos de la agencia se preguntaron qué pasaría si cada vez que se abriera una lata de este refresco, la marca te devolviera la sonrisa. El resultado, el siguiente. A smiling Coca-Cola ‘Happy Can’.
Visto en I Believe in Advertising.