Holita! Os traigo una receta francesa de chuparse los dediditos :)
Son los típicos caramelos blanditos de nata, esos que se te deshacen en la boca :) Yo los he hecho de café, pero una vez que tienes la receta, puedes hacerlos de cualquier sabor: canela, vainilla, chocolate, menta.... o estos mismos rebozados en chocolate mmm
Este mismo caramelo es el que llevan las barritas y chocolatinas, tipo "twix", así que... imaginación al poder! :)
Estos caramelos, Caramel mou, son típicos franceses. Los encontrarás en la mayoría de las pastelerías y chocolaterías del País vecino. Ellos usan muchos frutos secos y cascaras de frutas deshidratadas. A gustos... sabores.
Bueno... manos a la obra!
Ingredientes:
- Nata: 200gr
- Azúcar: 150gr
- Mantequilla: 10gr
- Café soluble: 5gr
Elaboración:
Ponemos a hervir la nata con el sabor que queramos darle al caramelo, en este caso, el café soluble.Mientras termina de hervir, vamos preparando el caramelo con el azúcar.
Una vez que el caramelo coge el color que queremos ( el que aparece en la foto más o menos) añadimos poco a poco nuestra nata caliente. Tienen que estar ( el caramelo y la nata hervida) casi a la misma temperatura a la hora de mezclar las. Para que el caramelo no se endurezca ni se descompense la mezcla.
Dejamos hervir moviendo cada medio minuto para que no se pegue. AVISO: al hervir subirá y parecerá que se nos desborda el líquido de la olla: retirarla del fuego en ese mismo segundo hasta que baje y volver a poner al fuego.Esto deja de suceder conforme se va espesando el caramelo. ¿Cuándo sabemos que está suficientemente espeso? pues... con un mini truco. Cogemos con el filito de una cucharilla un poquito de caramelo y lo sumergimos en un vaso de agua sacándolo al momento. Si el caramelo se mezcla con el agua es que sigue líquido. Si el caramelo aguanta en la cuchara estará. OJO! que no tiene porque estar duro duro y sin moverse de la cuchara que si no, se nos quedan duros los caramelos! retiramos el caramelo del fuego cuando hagamos la prueba de la cuchara y la mezcla no se deshaga en el agua.
Una vez que hemos retirado la olla del fuego incorporamos la mantequilla a nuestra mezcla y removemos.
Cogemos un molde rectangular o cuadrado, no demasiado grande. Pretendemos que nos queden unos caramelos de un grosor medio.Ponemos papel de horno en la base del molde y vertemos nuestra mezcla de caramelo.
Levantamos el molde y lo dejamos caer en la mesa, para que se vayan las burbujas. Tapamos con otro trozo de papel de horno para evitar que cree costra. CUIDADO AL COLOCARLO! QUE QUEMA! No vayáis a presionar con la mano que... que os veo!
Y ya está! lo dejamos reposar mínimo 2 horas a temperatura ambiente. Desmoldamos, cortamos y servimos.
En esta foto de abajo doblé y aplasté un caramelo para que veáis la textura tan blandita que tiene :)
Si los vamos a regalar, podemos envolverlos individualmente en el mismo papel de horno, retorciéndolos como caramelos. Se queda super cuki :) La foto la hice con el móvil antes de llevármelas para una amiga. Perdonad la calidad de la foto.
Y eso es todo amigos!
Espero que os haya gustado y que no dudéis en hacerlo!! y yo que lo vea :)
Besitos lacasitos!!
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