Revista Viajes

Colegio Teresiano, Barcelona

Por Nosoloviajeros @nosoloviajeros

Colegio Teresiano, Barcelona

El arquitecto catalán Antoni Gaudí se llevó su hierro forjado hasta el Colegio Teresiano de Barcelona. Al igual que con otras obras anteriores, ésta fue encargo de remodelación, ya que el colegio y la casa de la orden teresiana ya estaban construidos por el arquitecto Joan Baptista Pons i Trabal. Aunque el fundador de la Orden en Cataluña, Enric d'Ossó i Cervelló, pidió a Gaudí que mantuviera la austeridad del colegio y le impuso algunas limitaciones económicas, el arquitecto catalán acabó incluyendo su propio estilo en el edificio.Su arte es su seña de identidad, por lo que ésta puede verse en cualquiera de sus obras. Aquí, no iba a ser diferente.

En su remodelación interior Gaudí utilizó ladrillo visto, que aunque la Orden consideró caro e innecesario, según el artista ofrecía un ambiente monástico y rústico propio de un colegio de monjas. Ese mismo ladrillo fue utilizado también en sus exteriores, junto con el antes comentado, hierro forjado coronado con almenas. Lo cierto es que el resultado fue un edificio bastante sombrío, tal como quería el fundador. Fue tal su presión al arquitecto que se dice que éste acabó diciéndole: “Cada cual a lo suyo, mosén Enrique; yo, a hacer casas, usted a hacer misas".

Algunas de las características de sus exteriores son los pináculos con columna helicoidal de ladrillo acabados con las cruces típicas de Gaudí. El maestro también quiso introducir la cerámica, por lo que los distintos escudos de la orden teresiana fueron elaborados con este material. En sus interiores, sin embargo, destaca un pilar en medio de la columnata del la primera planta que no está rematado ni decorado. Al parecer, éste representa a Dios, por lo que el artista explicó que no necesitaba ningún adorno. También es curiosa ver una escalera de 14 peldaños que se suponía que tenía que llegar hasta el piso superior.

Sin embargo, ésta se quedó a la mitad. En realidad, no se sabe muy bien si fue a posta o si la dejó sin terminar por abandonar las obras antes de tiempo, ya que los desacuerdos con la Orden hizo que Gaudí se negase a construir también la capilla, que finalmente fue encargada a Gabriel Borrel i Cardona. Sin duda, el Colegio Teresiano es la segunda obra religiosa de más relevenacia, después de la Sagrada Familia, del arquitecto catalán.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista