Combarro: O Bocoi

Seguimos de vacaciones por las Rias Baixas y en esta ocasión nos acercamos a un pueblo muy bonito de la Ría de Pontevedra, Combarro. Pueblo marinero a medio camino de Sanxenxo y de Pontevedra, bien de interés cultural y conjunto histórico. Solo por darse un paseo por sus estrechas calles empedradas y sus bonitas casas de pescadores y hórreos, merece una visita.

No era la primera vez que estábamos en este pueblo, así que decidimos buscar el local en el que habíamos comido la última vez, y del cual teníamos un buen recuerdo. Se trata de la bodega O Bocoi. Combarro, debido a su carácter turístico, dispone de una amplia oferta gastronómica, y en muchos sitios nos encontramos a los siempre agradables camareros que te invitan a entrar en el local a tomar algo (nunca entendería que alguien entrara a un restaurante por que el camarero te lo diga, pero bueno, no discutimos los métodos de marketing) Uno de los que no tienen este servicio es O Bocoi. No es difícil de encontrar, ya que el pueblo no es muy grande, pero la dirección es Rua do Mar, 20. Disponen de una pequeña taberna donde se puede picar algo y luego de un par de comedores con vistas a la ría, una de ellas abierta a modo de terraza, que pega literalmente con la costa y cuando la marea sube llega hasta la fachada. Durante toda la comida tuvimos a un buen numero de gaviotas esperando esperanzadas que les tiráramos algo de comer.

Fuimos con la idea fija de pedir un arroz con bogavante para dos personas. Mientras esperábamos nos pusieron una croquetas. Nada del otro mundo, pero se agradece.

El arroz estaba muy rico, nada que objetar,  la verdad. Comimos hasta que nos salía por las orejas, y aún así hubieran comido otras dos personas fácilmente. En resumen muy abundante.

En cuanto al precio 22,5 la ración, lo cual comparado con los precios de la zona, perfecto.

Por pura gula pedimos postre que no pudimos acabar. Yo personalmente pedid unas filloas (frixuelos/ fayuelos), muy ricos, eso si los pedí solo con azúcar que me estoy cuidando…

Buena atención, buen servicio, buenas vistas y buen precio. Sitio recomendable si visitáis el pueblo. Tres lametones.