La gastronomía de la India, esta directamente relacionada con el uso de diferentes especies y de una gran variedad de verduras, siendo el marcado carácter vegetariano de su cocina un rasgo identificatívo del gusto culinario popular, en muchos de los casos influenciados incluso por motivaciones religiosas, aunque no por esto su cocina este exenta de deliciosos platos confeccionados con carne (principalmente pollo y cordero) ó pescado. La diversidad gastronómica viene dada por las diferentes especialidades locales y regionales, así como por la influencia que los distintos pueblos que colonizaron estas tierras, dejaron en la manera de interpretar y realizar los exótico platos de la cocina india.
En Jaipur, como en el resto de Rajasthán, la mayoría de los hogares confeccionan sus platos diarios principalmente, a base de verduras y legumbres acompañados de el típico Naan ó pan hindú, que en esta región se confeccionan bajo las variantes de roti y chapati, una masa horneada realizada a base de harina, agua y sal. Si durante tu estancia en esta región de la India, tienes la oportunidad de que alguna familia te invite a comer en su casa, debes saber que los hindúes, solo pueden comer con cuatro de los dedos de la mano derecha (el índice, se considera impuro, porque sirve para señalar y rascarse) y hacerlo con la izquierda se considera un signo de mala educación y descortesía. También conviene que trocees los alimentos, especialmente el pan, con la mano y no mordiéndolo... y aquí surge la parte más complicada de esta costumbre, porque como la mano izquierda no debe usarse, deberás apoyar el alimento sobre el plato de manera que con los dedos anular y meñique lo aguantas y con los otros dos que te quedan, pulgar y medio, tiras para separar el trozo que necesitas, todo un ejercicio, que necesitará práctica y paciencia, aunque también puedes hacer como que no has leído estos consejos y hacerte el despistado, seguro que no te lo tomarán demasiado en cuenta.
Puestos de comida en las calles de Jaipur
Para los viajeros occidentales, comer en Jaipur, puede llegar a ser toda una verdadera aventura y aunque en sus calles abundan los pequeños puestos tanto de emplazamiento fijo como ambulantes, que ofrecen todo tipo de bebidas y comidas preparadas a los transeúntes, es poco frecuente ver que los turistas, consuman alimentos en estos típicos puestos, que aparentemente no ofrecen demasiadas condiciones de salubridad.Puesto de comida callejero en las calles de Jaipur
Todo va en función de los gustos de cada cual y de la capacidad de adaptación, si eres de los que les gusta experimentar y probar las costumbres culinarias de los países y ciudades que visitas, te puedes llevar algunas agradables sorpresas, porque en realidad hay bastantes productos típicos que son bastante sabrosos a pesar de la sencillez de sus condimentos y elaboración, desde los panipuri, buñuelos crujientes que se rellenan con una masa de verduras y picante, los jabelis, dulces de color naranja, bañados en almíbar, pakora, hecha con harina de garbanzos, samosa, empanadilla crujiente rellena con papas y guisantes, hasta simple agua de coco, pasando por el típico lassi, una bebida refrescante a base de yogur, que se sirve fría en rústicos vasos de terracota, que podrás probar en el Lassiwala, un establecimiento en la MI Road, que pronto distinguirás por las largas colas que se forman en su perímetro.Trabajadores sirviendo yogur en Lassiwala
Pero en Jaipur, además de los numerosos puestos de comida callejeros, también existe una buena oferta de restaurantes que ofrecen en sus cartas de menús, una más extensa variedad de platos, pero eso si, siempre dentro de las especialidades hindúes. Yo visité con cierta frecuencia, dos de los más céntricos y conocidos, el restaurante LMB y el Niro´s, que ya me habían sido recomendados previamente, antes de partir para Rajasthán, por varios de mis amigos hindús en Tenerife. Recuerdo y reconozco, que las principales razones de mis visitas culinarias a estos dos establecimientos, se basaban además de su atento servicio y buena comida, en la tranquilidad del ambiente y en que allí si que podía pedir una buena cerveza fría, para acompañar mis pequeños festines... en la india, la licencia para servir bebidas alcohólicas, esta restringida a unos pocos restaurantes y hoteles.El atento personal del restaurante LMB
El restaurante que el Hotel LMB, tiene abierto al público en la céntrica zona de Johari Bazaar, era sin duda el que más veces frecuentaba, podría decirse que ya me había convertido en cliente habitual de la casa. Allí puedes degustar un típico Thali de Rajasthán, servido en una bandeja circular de metal, con una variada selección de las especialidades más representativas de la región, preparadas en pequeños boles, un plato que no debes perderte.Restaurante Niro´s en la transitada calle MI Road de Jaipur
Al Niro´s restaurante en la calle MI Road, también acudí en un par de ocasiones y en especial, me gustaba pedir su especialidad de cordero, que consumía con placer entre buenos tragos de fría cerveza, que por cierto costaba casi tanto como el propio menú.Restaurante con vistas sobre la ciudad en lo alto del Hotel OM Tower
En una ocasión especial, tras terminar con una de las jornadas de trabajo que me habían llevado hasta Jaipur, fui invitado por los patrocinadores, a una cena con música en vivo incluida, al lujoso restaurante situado en lo alto del Hotel OM Tower, desde el que se podía apreciar una interesante perspectiva panorámica de la ciudad.Modernos Centros Comerciales americanizados en Jaipur
Tras estos breves recorridos por la gastronomía de Jaipur, haciendo referencia a los sitios donde poder comer en esta ciudad, que pude conocer durante mi estancia allí, solo me resta añadir una última opción ó referencia, para aquellos que aun viajando por la India, añoren el modo de vida occidental de influencia americana y es, la de indicarles la posibilidad de acercarse hasta la Gaurav Tower, donde podrán encontrar puestos de comidas rápidas e incluso un autentico Mc Donalds, pero sin hamburguesas de vacuno, que evidentemente no son posibles en el país donde las vacas son sagradas.