Age of Reptiles: The Journey
La última entrega –por el momento- de esta serie está dedicada a los cómics más recientes que han dedicado viñetas a los cocodrilos mesozoicos. Como vamos a comprobar, estas criaturas siguen gozando de la estimación de artistas y guionistas.
Los cocodrilos han participado en los volúmenes “The Journey” (2010) y “Ancient Egyptians” (2015) de la impresionante “epopeya dinosauriana” de Ricardo Delgado Age of Reptiles. En el primero de ellos vemos el festín que se dan cuando la caravana de dinosaurios protagonista decide vadear un río y en el segundo se ganaron un puesto en la propia portada, como principales rivales de Spinosaurus.
Pristichampsus, riéndose en japonés
La serie nipona Eden no Ori #8 (2008) transcurre en una isla con fauna extinta, entre la que se encuentra Pristichampsus (Gray, 1831), cocodrilo de largas patas que vivió hace 40 millones de años. Los hallazgos de sus dientes, parecidos a los de los terópodos, hicieron pensar en su día a los paleontólogos que algunos dinosaurios –aparte de las aves- habrían sobrevivido al Mesozoico.
Les dinosaures en BD
SuperCroc y sus superfauces a prueba de kriptonita
También hemos podido verlos en un par de cómics didácticos, de distinta procedencia. El galo Les dinosaures en BD (2010) introdujo al gigante Deinosuchus y el norteamericano Dinosaurs and Prehistoric Predators (2011) nos presentó al temible Sarcosuchus (Taquet, 1966), conocido popularmente como SuperCroc (por algo será).
Love #4
La cuarta entrega de la gala Love (2011) está dedicada a los dinosaurios y la fauna con la que compartieron su espacio, como este cocodrilo que pone en aprietos a un terópodo despistado. Sin dejar Francia, en la adaptación de Le monde perdu (2013), Christophe Bec bautiza una especie mesozoica como Pablotisuchus gladysraensis. Por supuesto, estamos ante un flagrante nuevo ejemplo de Nomen ignotum. Y hablando de adaptaciones literarias, también hay cocodrilianos en las que Mike Wolfer realizó para American Mythology del clásico de E.R. Burroughs The Land that Time Forgot a partir de 2016.
Where Monsters Dwell
Garth Ennis (Marjorie Finnegan, Temporal Criminal) recuperó al superhéroe de la Edad de Plata The Phantom Eagle (Gary Friedrich/Herb Trimpe, 1968) y lo envió al mundo perdido de la miniserie Where Monsters Dwell (2015), en la que aparte de por los dinosaurios, los protagonistas las pasan canutas debido a un gigantesco y hambriento cocodrilo del que les librará un aún mayor escualo. En el sentido contrario, en el número de presentación de G.I. Combat (2012), será un cocodriliano el que libre al protagonista de un engendro con cuerpo, cuello, cabeza y cola de saurópodo y patas de terópodo. Y en la última entrega de Avengers Arena (2014), Reptil se transforma de Triceratops en un gigantesco cocodrilo mesozoico (¿Deinosuchus?) para ayudar a sus amigos.
Jungle Fantasy Ivory
En la conclusión de The Terminus Project (2014), el polaco Jakub Martewicz envía a los protagonistas al Mesozoico, donde vuelve a ponerse de manifiesto el poder destructivo de estos reptiles. Pero los cocodrilos pueden dar aún más juego e incluso se ha planteado su papel libidinoso en el porno Jungle Fantasy Ivory (2016).
Cretaceous
Ya conocéis nuestra debilidad por las series protagonizadas en exclusiva por dinosaurios, los cómics DE dinosaurios a los que dedicamos toda una serie de posts hace no mucho. Naturalmente, un buen cómic DE dinosaurios puede –y debe- dar entrada al resto de la biota coetánea, tal como hace Cretaceous (2019), protagonizada por un tiranosaurio al que Tad Galusha está a punto de hacer desaparecer en esta escena a manos de un cocodrilo.
La conclusión es clara: en los cómics, tenemos cocodrilos mesozoicos para rato. Habrá que estar atentos.
The Land that Time Forgot: See-ta, the Savage (2018)