A la hora de organizar una cena en casa, para familiares o amigos, los cálculos se vuelven una de las preocupaciones recurrentes. El objetivo fundamental es nunca quedarse cortos pero, también no menos importante, no terminar sobre estimando, lo que lleva a gastar de más.
Si se piensa en preparar un asado, por ejemplo, hay una regla de oro básica que se rige por la famosa máxima "medio kilo por persona".Un tema no menor a la hora de recibir invitados en casa, especialmente para una cena, es calcular el vino necesario para no quedarse cortos.
En este sentido, muchos tienen su cava propia, lo que reduce notablemente el problema del stock y la disponibilidad inmediata de una botella extra.
Pero para quienes no tienen un inventario muy holgado o incluso, ya como invitados a una cena, deben hacerse responsables de llevar "las bebidas", tener en cuenta un cálculo simple servirá para evitar fallar a la hora de estimar la cantidad necesaria.
Y así como para la carne hay una fórmula que en general funciona, el vino también tiene sus tips.
Y si bien se trata de un promedio y, como tal,mucho depende del perfil de los comensales -como por ejemplo, si hay chicos o la cantidad de hombres y mujeres- no deja de ser una guía útil a la hora de definir el número mínimo de botellas que seguramente serán consumidas a lo largo de una comida para
En este sentido, para una cena por pasos, es decir, que considere un aperitivo, una entrada, un plato principal y un postre, es ideal tener cuatro estilos de vinos bien diferenciados.
Si bien a primera vista parecería ser complejo para algunos referirse a "pasos" para una reunión de amigos o familiares, lo cierto es que en la práctica, muchos terminan haciéndolo sin proponérselo.
Cuando se prepara una picada antes de una comida, o cuando se disponen previamente preparaciones simples y rápidas para ir abriendo el apetito, como unas bruschettas, se está implementando el sistema por pasos.
Para una comida para 10 personas, considerando que todos son adultos, resultará ideal abrir la comida con un espumante. En este caso, se suele considerar una copa promedio por persona, lo que equivale a 90 ml. Esto implica que dos botellas deberían alcanzar perfectamente. Al tratarse de un promedio, se está considerando que habrá quienes opten por no consumir y otros que, paralelamente, preferirán beber dos copas.
Con la entrada, se podrá optar por un vino blanco o uno rosado. Para comidas de 10 personas, se estima una copa por persona, es decir unos 120 ml. De este modo, con dos botellas será suficiente (podría ser una de blanco y una de rosado, para ganar en versatilidad), esto implica casi1.200 ml, por debajo de los 1.500 ml que representan dos vinos.
A la hora del plato principal, siempre teniendo en cuenta que se sirva una comida que acepte las variedades tintas, se deberá consideran un promedio de dos copas por comensal.
Para los tintos, la medida es levemente superior a la de los blancos. Así, mientras que una copa de blanco equivale a 120 ml, una de tinto representa unos 150 ml.
De modo que las dos copas totalizarán unos 300 ml. Esto implica que, para una comida para 10 personas, se necesitarán unos 3.000 ml, equivalente a 4 botellas de 750 ml.
Paralelamente, si se quiere cerrar la comida con un postre y con un vino que maride, habrá que tener en cuenta el tamaño de la botella.
En general, para esta instancia se consideran un consumo de 60 ml por persona, dado su contenido de azúcar. Así, si se opta por un cosecha tardía en botella de 500 ml, serán necesarias dos botellas. En cambio, si se opta por un espumante dulce o por un vino fortificado, que en general vienen en botellas de 750 ml, bastará con una.
A esta estimación habrá que sumarle el agua, de la cual será necesario considerar 750 ml por persona. Es decir, unas 5 botellas de un litro y medio para esta cantidad de comensales.
Como se mencionó anteriormente, es un promedio y, como tal, dependerá del tipo de perfil de los consumidores.
Para cerrar este wine tip, hay una aclaración que nunca está de más: la importancia de beber con responsabilidad y, si se va asistir a una comida donde se tomará alcohol, luego no conducir.
Fuente: iProfesional