Las memorias usb continúan siendo una herramienta básica en nuestra vida diaria, no necesitamos ser informáticos o Ingenieros para hacer uso de ella, cualquier persona la utiliza para transportar información de un lugar a otro de una manera practica. El problema es que las USB han dejado de ser tan seguras, es susceptible a ser violado y dejar que nuestra valiosa información sea alcanzada por terceros.
En un mundo que ya no es seguro nunca se puede ser demasiado cauto, y es por eso que ahora más que nunca debemos ser conscientes respecto al uso que hacemos de nuestra información electrónica, y cómo lo hacemos.
¿Pero como mantenernos seguros?.
No es para nadie secreto que el sentido común es el mejor aliado cuando se trata de la seguridad, pero a veces hay que ir un poco más allá y trastear un poco con nuestro ordenador y dispositivos externos para lograr un poco más de seguridad.
- Cifra la información de tu memoria USB: cuando se trata de información sensible a la que solo deberíamos acceder nosotros siempre es recomendable cifrar estos datos.
- Desactiva el autorun: la función de ejecución automática está pensada para facilitar la vida al usuario promedio, pero puede ser fácilmente aprovechable para ejecutar software malicioso en dispositivos USB que se conecten a nuestro ordenador, por lo que recomendamos desactivar esta función.
- Utiliza un ordenador con Linux como puente: si tienes un viejo ordenador en casa puedes darle una segunda oportunidad instalando una distribución Linux y usarlo como línea de defensa entre tu ordenador habitual y el resto del mundo. La idea es tener una memoria USB limpia para mover información entre tu ordenador con Windows y el que usa Linux, y este ultimo recibirá el resto de memorias.
- No dejes conectadas las memorias cuando no las uses: y especialmente intenta no tener conectadas las memorias a tu ordenador cuando hagas uso de servicios bancarios y contraseñas personales.
- Usa diferentes memorias para el trabajo y propósitos personales: a ser posible, intenta mantener varias memorias dedicadas a cosas concretas y nunca intercambies información entre ellas, así añades una capa extra de seguridad a los datos que te pueden ser vulnerados.
Muchas veces no hace falta complicarse demasiado la vida, y aunque a menudo solemos pasar de cuestiones triviales por ser las más sencillas, son justo estas las que nos pueden salvar la vida. Con las memorias USB aplican los mismos consejos que podemos usar en general para mantenernos resguardados de todo tipo de malware.
- Fabricantes confiables: aunque puedan costar un poco más que muchas marcas chinas, podrían significar una enorme diferencia en lo que a seguridad respecta.
- Aplica las actualizaciones de software: en el navegador, el sistema operativo, y en general en todo el software que uses. Las actualizaciones suelen aplicar parches de seguridad.
- Nunca uses memorias desconocidas: especialmente no si te las encuentras en la calle. Lejos de ser un golpe de suerte, podría ser un gran desastre para tu seguridad.
- Cambia tus contraseñas periódicamente: a veces lo mejor que podemos hacer es adelantarnos a quienes vulneran nuestros datos.
- Pasa el antivirus de vez en cuando: casi no hace falta decirlo.
- Ten cuidado con lo que almacenas: intenta no guardar ejecutables o software de origen dudoso en tus memorias USB.