Necesito paz interior ¿Lo has dicho o pensado alguna vez?
El ritmo de vida de alta velocidad que llevamos en el mundo actual así como la menor calidad de los momentos que vivimos, luchando por todo por insignificante que eso sea, posiblemente te haya hecho replantearte muchas cosas.
Y seguramente esas palabras solicitando ayuda habrán quedado simplemente en una mera frase pronunciada o pensada en un determinado momento. Pero convirtiéndose en un hecho repetitivo en el tiempo de forma angustiosa, logrando entrar en un bucle emocional de ansiedad y desesperación que logra minar nuestra alegría, optimismo y vitalidad. El sosiego interior brilla por su ausencia.
La mayoría de la gente simplemente no se siente con sensación de paz, de tranquilidad, de serenidad, durante todo el día.
Sin embargo, hay un instante en el que es necesario decir "¡basta ya!""¡Hasta aquí hemos llegado!". Hay que acabar con las preocupaciones innecesarias y la velocidad desenfrenada de nuestra vida.
Hay que reencontrar la paz interior. Para ello es necesario que hagamos un paréntesis en nuestra vida y nos dediquemos un tiempo para reordenar nuestras necesidades, nuestras prioridades vitales.
Tu actitud y respuestas ante los hechos de la vida pueden ir acompañados de ansiedad e ira, o puedes responder con calma y paz.
¿Qué es la paz interior?
Podemos decir sin riesgo a equivocarnos que la paz interior es una sensación de bienestar o felicidad, que nos llena de una profunda tranquilidad. Es un estado en el que la mente se aísla y deja fuera miedos, preocupaciones, sufrimiento.
Cualquier sensación, pensamiento y emoción negativa que nos pudiera perturbar queda fuera de la burbuja de calma que obtenemos con este estado.
Entablamos una conexión especial o superior con nosotros mismos, y con el maravilloso Universo que nos rodea, percibiendo y disfrutando de detalles y matices que antes no nos habíamos dado cuenta. Decir paz interior es decir paz espiritual, es sentir que la conexión mente espíritu es total.
La paz mental significa dejar de luchar por el tiempo en el que somos capaces de permanecer en ella, apartando de un plumazo todos los problemas y contratiempos de nuestra rutina diaria.
La importancia de la mente para conseguir la calma interna
Cuida tus pensamientos porque se volverán palabras.
Cuida tus palabras porque se volverán actos.
Cuida tus actos porque se volverán costumbres.
Cuida tus costumbres porque forjarán tu carácter.
Cuida tu carácter porque forjará tu destino.
Y tu destino será tu vida
Mahatma Gandhi
Quizás no haga falta añadir nada más después de estas sabias palabras de Ghandi, no obstante si te recomendamos la lectura de nuestro manual de uso y disfrute de la mente . La mente lo es todo en nuestro crecimiento personal y por supuesto en nuestro sendero hacia la tranquilidad personal, hacia nuestra calma interior.
Tanto si creemos que podemos alcanzar la paz interior como si creemos que no lo conseguiremos, en ambos pensamientos tenemos razón. Sólo depende de nosotros elegir uno u otro. En el primero tendremos que trabajar con determinación para alcanzar nuestra paz espiritual, el segundo no nos costará mucho decidirlo pero nuestra calidad de vida descenderá muchos enteros. ¿Qué eliges tu?
No permitas que tu mente te deje en tu zona de confort, da pasos y sal de allí. Notarás los beneficios en poco tiempo. Aunque eso si, te tendrás que esforzar. La paz interior se lo merece.
¿Es posible alcanzar la paz interior?
Quizás te pase por la cabeza que encontrar la calma espiritual es imposible. Encontrar la serenidad en el mundo atronador en el que nos movemos es un tarea a veces más complicada de lo que debería ser. Cualquier situación adversa se ve magnificada por el frenesí, la velocidad que respiramos en la civilización actual.
Sin embargo, eso no implica que sea imposible alcanzar la paz interior. Tenemos que esforzarnos en conseguir filtrar todo lo que proviene de nuestro exterior. Y para ello es necesario conseguir manejar nuestra propia nave vital. Una vez que tomamos las riendas de nuestra vida, podemos llevar a la realidad alcanzar la paz interior.
¿En que momento se logra estar en calma?
Podemos decir que la paz espiritual se alcanza poco a poco, sorbito a sorbito y a lo largo del camino por el que transitamos. Se trata de una decisión personal e intransferible, en la que tenemos que modificar muchos hábitos y crear otros comportamientos que nos den esa tranquilidad vital.
Depende de cada personal llegar a ese estado en un momento u otro, no hay una ciencia exacta. Unos necesitarán toda una vida y otros por genética del alma proclive a esa calma emocional, llegarán a ese estado con extremada facilidad.
La paz personal engendra energía. Nuestro incremento eficaz de energía física y espiritual es consecuencia de nuestro descubrimiento de la paz interior. Éste es un paso de gigante hacia la paz interior al nivel espiritual más elevado.
¿Cómo encontrar la paz interior?
1. Invierte tiempo en meditar y reflexionar.
Se trata de aquietar la mente y para ello que mejor que realizar ejercicios para una mejor forma de encarar el día a día de una forma más pausada mentalmente.
Tienes que programar tu vida dejando un espacio para recobrar la serenidad y que mejor forma que hacerlo que a través de la meditación. Si no sabes como hacerlo, no tendrás excusa tras la lectura te nuestra sencilla guía de meditación.
Después de meditar, tu mente y tu cuerpo estarán más preparados para encarar unos minutos de reflexión en busca de esa deseada paz interior.
2. Aprende a convivir con el ruido de tu propio silencio.
Hoy en día es complicado conversar con uno mismo. Adentrarnos en la belleza de nuestro Universo personal requiere de un sosiego interior en el cual tenemos que acostumbrarnos a convivir con nuestra propia soledad.
Tenemos que aprender a alejarnos con nuestra mirada interior de nosotros mismos, convirtiéndonos en merso espectadores, para lograr sentir de esta forma nuestra agitación interior. Poco a poco y con paciencia, ralentizando nuestra respiración, nuestro pulso cardiaco, alcanzaremos la placidez interna.
Quizás el silencio es el poder más grande que existe. Porque todo lo que existe son aspectos parciales del silencio.
3. Simplifica tu vida.
La manera de disfrutar de unos instantes de nuestra preciada vida depende de nosotros. Si, no mires para otro lado, exclusivamente de nosotros, y tu estás incluido. Al igual que yo.
Si limpiamos nuestra CPU mental y la dejamos más libre de pensamientos negativos e ideas inútiles podremos centrarnos en disfrutar de una vida más fluida y feliz. Una vida con más paz interior.
4. Practica la gratitud.
Uno de los grandes secretos para lograr la paz interior es el agradecimiento. ¿A quién?
Pues a todo. Al Universo, a los que nos rodean, a la vida. Debemos extraer el jugo positivo de todas las vivencias que tenemos.
Cuando empezamos a sentirnos agradecidos por lo que tenemos, en vez de quejarnos por lo que no tenemos, reencontramos un nuevo equilibrio interno.
Tenemos que aprender a dar sin esperar nada a cambio. La generosidad está vinculada a la gratitud y alejar el egoísmo ayudará a que el sosiego nos abrace con sus brazos. Reduce tus quejas, y encuentra una manera de estar agradecido, no importa qué. Y luego sonríe.
5. Evita la crítica, el peor enemigo de la paz interior.
Estamos equivocados respecto a la crítica negativa. Pensamos que hacerla nos va a dejar como nuevos, en un estado de tranquilidad. Pero no es así, lo cierto es que esta nos corroe y nos destruye internamente. Dejando posos de acidez dentro de nosotros que tardamos en expulsar. Hace tanto daño al que la recibe como al que emite ese juicio de valor.
Debemos aprender a ver lo positivo que nos rodea. Y pasar por alto lo negativo. Esto incluye a la crítica.
6. Haz del perdón tu arma más poderosa.
Pedir perdón y perdonar se perfilan como procesos terapéuticos importantes para alcanzar la paz espiritual. Perdonar consiste en un cambio de conductas destructivas voluntarias dirigidas contra el que ha hecho el daño, por otras constructivas.
Hay que perdonar, tanto a otros como a nosotros mismos. Quizás en muchas ocasiones sea complicado perdonar a terceros por daños que nos hicieron en el pasado, pero mucho más difícil es perdonarnos a nosotros mismos. Es ahí donde tenemos que incidir para alcanzar la calma interior.
El perdón no es un acto único que se hace en un momento dado, es un proceso continuo que se puede ir profundizando y completando a lo largo del tiempo.
7. Aceptación de nuestra realidad
No todo en esta vida va a ser un camino de rosas. Encontrar la paz interior significa, ante todo, equilibrio.
Y para ello tenemos que aceptar que todo no es blanco, ni negro. Tenemos que aceptar ciertos sentimientos, sensaciones y emociones negativas que están instaurados en nuestra vida, así como situaciones y vivencias que no son tan agradables como nos gustaría que fueran. Pero la vida es así.
Tenemos que aprender a equilibrar nuestra vida. Hay cosas de las que nos podremos desprender para aligerar nuestra carga, pero tenemos que aprender a vivir con muchas otras. De esta forma nuestra mente dejará de luchar y acabará encontrando la paciencia y la tan ansiada quietud interior.
Hábitos para la paz interior
1. Empezar el día de forma pausadaLo ideal es comenzar el día con tranquilidad, y para ello quizás sea mejor adelantar el despertador para lograr tener más tiempo para saltar de la cama, asearnos sin prisas y desayunar disfrutando del momento. Si además somos capaces de dedicar algunos minutos a la meditación, todo irá rodado para acercarnos a la paz interior de una forma mucho más precisa.
2. Ser consciente del instante que vivimos.Gestionar el momento presente es fundamental. No permitamos que la vorágine nos devore y nos lleve del pasado al futuro sin permitirnos estar aquí y ahora. Tenemos que gestionar nuestro momento emocional, respetarlo y analizarlo para poder ir más allá de nuestra realidad y de esta manera encontrar la paz espiritual.
3. Haces tuyo este pensamiento: No soy el centro del Universo.Olvida que eres una diana a la que apuntan todas las acciones que ocurren a tu alrededor. Eso no es así. Si con humildad empiezas a grabar en tu disco duro personal que estás al margen de lo que ocurre, que tu decides como percibir la realidad, te darás cuenta que si quieres estar en paz contigo mismo es necesario que abandones el victimismo y percibas la parte buena que te brinda cada experiencia de la vida.
4. Gestiona bien el tiempo que tienes.El tiempo que tenemos es limitado, y esto en si mismo es un gran obstáculo para la paz interior. El teléfono que nos acompaña e interrumpe en todas partes, internet que nos acompaña como nuestra sombra desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, y multitud de otras distracciones hacen que centrarnos en nosotros mismos o en los que nos rodean sea cada vez más difícil.
Esto nos provoca ansiedad y estrés, los peores compañeros para una vida saludable de la paz interior. Tenemos que aprender a focalizarnos en lo que estamos haciendo, sea lo que sea. Aprenderemos que existe mucha paz en sólo hacer una cosa, y dejar ir todo lo demás.
Poco a poco llevarás el control de tu vida y notarás el equilibrio, la calma y la paz en todo lo que haces.
1. Tendencia a actuar y pensar de forma espontánea y natural.Pensar mucho antes de hablar o actuar puede ser un comportamiento anclado a temores y miedos al error. Cuando estás en un estado de calma interior, el miedo y el temor se minimiza.
2. Capacidad para disfrutar del momento.Los miedos, expectativas y temores al futuro ya no oscurecen la luz del momento presente y nos permiten que consigamos focalizar nuestra atención en el instante actual.
3. La autocrítica brilla por su ausencia.Nos aceptamos tal y como somos y pasamos por encima de juicios severos de nosotros mismos.
4. Una pérdida de interés en juzgar a los demás.La empatía y el respeto a los demás se apoderan de nuestro ser logrando una mayor felicidad interior y conexión con los que nos rodean.
5. Una pérdida de interés en el conflicto como medio de relación con los demás.Aquello que antes contemplábamos como lo normal, discutir en defensa de aquello que considerábamos nuestra verdad, pasa a un segundo termino, conocedores desde nuestro sosiego que no hay una verdad absoluta.
6. Apenas nos preocupamos. 7. La sonrisa se apodera de nuestro rostro y de nuestra vida.El amor se convierte en el motor de todo lo que hacemos y así lo trasmitimos cambiando nuestra realidad y la de los que nos rodean.
Meditación para la paz interior
Quiero finalizar este artículo con una pequeña meditación que podrías realizar antes de irte a dormir. Si la repites durante un tiempo conseguirás jornadas más llenas de sosiego en tu vida.
1. Relajación para silenciar la mente
Lo importante es que estés cómodo, bien sentado o tumbado. Elige una postura que te resulte cómoda. Coloca las palmas de tus manos hacia arriba y respira tres veces de forma profunda inspirando por la nariz y expirando por la boca. A la vez aparta tus pensamientos de tu cabeza y silencia tu mente por completo.
Observar como es tu respiración. Su ritmo, el sonido, el recorrido del aire respirado y desde donde respiras. Relaja tu respiración a medida que vas relajando tu cuerpo. En cuanto ves que un pensamiento aparece déjalo ir volviendo suavemente a la atención a tu respiración relajada.
2. Conexión con tu corazón
Dirige toda tu atención a tu corazón. Tu Ser, tu poder, tu energía y tu paz interior se encuentran allí, no hay otro camino hacia la paz interior.
Sitúa tu mano en tu corazón y siéntelo, disfruta de el. Siente como late y permítete sentir cualquier cosa que aparezca en ese momento, aceptando todo y dejándolo ir.
Centra tu atención en latir de tu corazón y escucha este suave murmullo que pasa a través tuya. Siente de esta forma como conectas con tu esencia, con tu paz interior. Cómo conectas con todo el Universo. Con la vida en si misma.
Luego vuelves la mano a su sitio.
3. Realización de decretos y afirmaciones.
Diremos estas frases con tranquilidad, sin prisas.
Después de decir cada frase, la sentiremos con todo nuestro ser. Sintiendo de esta forma paz espiritual, en todo nuestro ser.
Cuando repitas cada frase y en el momento más alto de sentimiento sitúa tu mano sobre tu corazón durante unos breves instantes.
Este movimiento quedará en tu vida como un anclaje que podrás usarlo siempre que quieras sentir esta paz interior. Solo tendrás que poner tu mano en el corazón para sentirlo.
Las frases que debes recitar para mejorar tu paz interior:
- Mi mente tiene sólo pensamientos que me recuerdan que soy un ser eterno, impecable, plenamente amado y perfecto en este mismo instante.
- Mi mente tiene solo pensamientos de paz, amor, alegría, abundancia y felicidad.
- Soy un ser de plena paz, amor y confianza. Que no se me olvide.
- Yo Soy la Paz
- Soy el Amor
- Soy la Confianza
- Yo Soy la Calma y Serenidad
- Soy un Ser Ilimitado
- Soy la pura Alegría
- Soy la Paz
Después de que hayas conectado con las afirmaciones de arriba, elige a una persona que conoces y bendícela con esta paz y amor que sientes.
Bendice a la persona e imagina-tela sonriendo, feliz y en paz. Cada vez que meditas, elige otra persona diferente.
Agradece a Dios, al Universo o a quién tu desees, por haber alcanzado en este instante la paz interior.
Recomendación final
A continuación te dejo con una maravillosa melodía que atrapará tu corazón y tu alma y que te puede ayudar a realizar la meditación de la paz interior. Enciende un incienso y disfruta de la experiencia de conectar contigo mismo.
¡Te deseamos que la paz interior te acompañe en tu vida! 😊
PD.- A continuación del video tienes algunas frases de paz interior ¡espero que te agraden!
15 Frases budistas para encontrar la paz interior
Esperamos que alguna de estas frases para la paz interior te ayuden a acabar de encontrar tu camino:
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