Una opción interesante para no usar tanta manteca en las recetas es usar ghee o manteca clarificada (o purificada) que es básicamente una manteca común a la que se le saca el suero y los sólidos de la leche para que quede más liviana y saludable. Se puede usar como la manteca común, para saltear alimentos, para freír en estado líquido y para condimentar o darle sabor y textura a cualquier receta.
Ingredientes: Un pan de manteca (recomiendo usar una buena cantidad porque reduce bastante)
En una ollita poner la manteca a fuego bien lento, dejar que se torne líquida.
Ir sacando con cuidado la espuma que se forma por encima lo más que se pueda.
Una vez que se derritió toda la manteca dejar enfriar cinco minutos para que el suero baje al piso de la cacerolita. Pasar el líquido a un frasco, ayudándose con un filtro de papel o de tela para que no pase el suero, siempre despacito para que todo vaya quedando abajo.
El suero se descarta (hay gente que lo guarda para alguna receta). Dejar enfriar sin la tapa. Una vez frío van a notar que vuelve a tomar consistencia. Lo pueden reservar en la heladera y cuando lo quieran usar recomiendo sacarlo un ratito antes para que se ablande, o dejarlo a temperatura ambiente en una alacena.