Imagina que pudieses llevar unas gafas que tienen un efecto lupa e incrementan el tamaño de los motivos de optimismo que te regala la realidad día a día. Imagina que pudieses llevar todos los días, incluso mientras duermes, las “Gafas de la felicidad” que dan título al libro de Rafael Santandreu.
Lo cierto es que no podemos acudir a una óptica especializada para dar a los cristales de nuestras gafas la graduación de la felicidad pero sí tenemos un poder más importante: tomar la decisión de corregir nuestra miopía mental al tomar mayor conciencia de los motivos de gratitud que tenemos en nuestra vida para sentirnos afortunados por todo lo bueno que nos rodea.
El primer paso para mantener el foco de atención en lo positivo es valorar de verdad todos esos bienes existenciales como un regalo que es más importante que cualquier carencia. ¿Cómo mantener tu mente centrada en el optimismo? En 3Contigo te proponemos un ejercicio de transformación en 6 pasos:
- El esfuerzo que implica el pesimismo que nos produce una enorme descarga de energía negativa es mucho más alto que tomar la decisión de ser optimista y experimentar en primera persona los beneficios positivos que aporta esta actitud desde el primer instante. Cualquier cambio de hábito requiere un esfuerzo, sin embargo, el premio merece la pena.
- Existe un diálogo interior constante en la mente. Para mantener el foco de atención en lo positivo conviene realizar el ejercicio automático de ofrecer una alternativa positiva a cualquier mensaje negativo que invada la mente de una forma automática. Por ejemplo, una persona puede enviarse a sí misma el mensaje negativo de: “Me siento solo porque hoy no tengo nadie con quien quedar para ir al cine”. ¿Cuál sería el pensamiento alternativo?
Un mensaje positivo que puedes darte en esta situación es: “Gracias a que hoy iré solo al cine podré elegir la película que a mí me apetece ver”. La realidad tiene muchas lecturas posibles: elige aquella que te ayude a sentirte mejor contigo mismo alimentando tu universo emocional de belleza.
- No te pongas excusas a ti mismo. Puede que tus circunstancias externas no sean tal y como a ti te gustaría. Sin embargo, el reto del optimismo surge precisamente de aprender a valorar el lado bueno de cada circunstancia que nos afecta como protagonistas de nuestra propia vida. Existen circunstancias que podemos controlar porque dependen de nuestra voluntad pero existen muchos elementos que trascienden a la voluntad individual.
- Disfruta de tu descanso durante el verano pero no renuncies al placer de disfrutar de experiencias enriquecedoras. Por ejemplo, las universidades ofertan interesantes cursos de verano durante la época estival que pueden ser una oportunidad excelente para conocer gente nueva a través de una experiencia formativa que ofrece una metodología flexible.
- Disfruta de tu hogar como un espacio de bienestar e intimidad en el que vivir en letras mayúsculas. Es decir, llena cada espacio de tu casa con tu propia esencia. Disfruta de un pequeño rincón de lectura en casa, cuida el orden externo en tu dormitorio, emprende retos saludables como aprender a cocinar postres caseros, puedes ser el perfecto anfitrión de planes en casa, disfruta del placer de una siesta relajante, organiza una sesión de cine casero…
Aunque es muy importante tener una vida activa realizando ejercicio físico y deporte también puedes hacer excepciones a la norma de vez en cuando al darte el premio de estar en casa durante un día para disfrutar de la comodidad emocional de estar bien en tu núcleo de intimidad.
- Elige una banda sonora positiva para el baile de tu vida. Canta, baila, ríe y sueña.
Maite Nicuesa para 3Contigo Coaching.
coaching personal, profesional y para la salud en Madrid y Figueras